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96-22. otro... llegó vn plato de fruta delante: no parece ser del || ante (R. M., V, 434), porque en seguida (l. 25) leemos «se le quitaron de delante»; es más corriente la lección «le llegó un plato», tal como se ve en la l. 26. le «llegó otro»; ¿se omitió este le como en otros lugares cuando se trata de dos sílabas iguales contiguas? (N. del E.)

 

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97-3. juego de maesecoral: comp. Quevedo, B. A. E., III, 118, 215; A. Bonilla, Anales, etcét., pág. 62; Pícara Justina, I, 1, cap. 2; edic. Puyol, III, pág. 248. (N. del E.)

 

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97-16. El texto: estomogo. (N. del E.)

 

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97-23. el humedo radical: vid. Pero Mexia, Silva, edic. Bibliof. esp., II, 272. Cov. cita a Alberto Magno, voz humedo; «humidum est vitae qualitas et potentia». (N. del E.)

 

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98-3. omnis saturatio, etcét.: vid. Bowle, Anot., pág. 115, nota 15; Cej., Dicc., 793; no se ha de insistir en que esta cita tenga nada que ver con los aforismos de Hipócrates; el doctor Recio se acordó del dicho popular omnis saturatio (también indigestio), mala, panis autem pessima, y lo arregló para aplicarlo al «plato de perdices» tan apetecido del gobernador. (N. del E.)

 

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98-23. olla podrida: vid. Cov. voz olla; D. Q., cap. XLIX, 125-4; veamos cómo Lope describe


una reverenda olla
a la usanza de la aldea.



Entraban en ella «buen carnero y vaca gorda, la gallina que dormía junto al gallo..., una famosa liebre..., un pernil de tocino..., dos varas de longaniza..., un chorizo y dos palomas..., ajos, garbanzos, cebollas tiene, y otras zarandajas». -El Hijo de los leones, II, 7; no tenía tanto la olla de Gerarda en La Dorotea, V, 2. (N. del E.)

 

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99-11. canutillos de suplicaciones: Comed. y Entr., III, 142-21; Clem., D. Q., V, 436; R. M., V, 440; Pícara Justina, edic. Puyol, I, 79, III, 208. (N. del E.)

 

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99-21. Tirteafuera: sobre el nombre de lugar véase Clem., V., 437; Madoz, Dicc. geogr., le consagra algunas líneas, pero ha desaparecido de los mapas corrientes. En el Libro de la montería del Rey Alfonso XI (Bibliot. venatoria de Gutiérrez de la Vega, II, 242), hallamos «la sierra de Tirate Afuera y el Valle de Johan Pérez es todo un monte y es bueno de oso». El modismo como exclam. se halla con frecuencia: comp. Juan del Encina, edic. acad., pág. 124; Gil Vicente, edic. Hamburgo, 1834, I, 41 y 49; Contreras, Selva de Aventuras, B. A. E., 494a; Lope, Fuente Ovejuna, I, VII; Gallardo, Ensayo, III, 274, menciona un Dr. Nardo Ant. Recio; en Pérez Pastor, Bibliogr. Madr., II, 295, hay recuerdo de un Dr. Pedro Díaz de Agüero. (N. del E.)

 

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99-24. La universidad de Osuna: ya aludida en D. Q., III, 40-13; fundada en 1549 por D. Pedro Téllez Girón, conde de Ureña, fue durante sus primeros años un centro cultural de importancia; subsistió hasta 1820. (N. del E.)

 

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101-2. soy vizcaino: véase Pell., D. Q., V, 81; Clem., V, 440; Cov. voz Cantabria, escribe: «De los Vizcaynos se cuenta ser gente feroz y que no viuen contentos sino es teniendo guerra; y seria en aquel tiempo quando viuian sin policia ni dotrina. Agora esto se ha reducido a valentia hidalga y noble, y los Vizcaynos son grandes soldados por tierra y por mar; y en letras y en materia de gouierno, y cuenta y razon, aventajados a los demás de España. Son muy fieles, sufridos y perseverantes en el trabajo». Hay alusión a los vizcaínos en Novelas, III, 105-24 y 284-6. (N. del E.)