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ArribaAbajoCartas de Ricardo Ruiz Orsatti a Galdós acerca de Marruecos (1901-1910)

Robert Ricard


Aunque, por varias circunstancias, me toca escribir esta breve introducción, la publicación de las cartas que siguen es fruto de amplia colaboración. Las encontró en la Casa-Museo Pérez Galdós de Las Palmas el Dr. José Schraibman, actualmente profesor de la Universidad de Indiana, las hizo fotocopiar y copiar a máquina, y después nos cedió generosamente todo su material; la Casa-Museo, por el conducto de su director, D. Alfonso Armas Ayala, autorizó la publicación con la misma generosidad; y por fin mi amigo el profesor Georges S. Colin me prestó su colaboración de arabista en las materias de su especialidad. A todos debemos expresar nuestro agradecimiento.

*  *  *

La pequeña colección epistolar que viene a continuación consta de 18 cartas, de dimensiones muy desiguales, escritas por Ricardo Ruiz Orsatti de 1901 a 1910. Quince de ellas van dirigidas a Galdós, tres a varias personas (núms. 9, 10 y 11), pero también con relación a Galdós. Ricardo Ruiz Orsatti es un arabista español bien conocido, hermano de otro arabista igualmente conocido, Reginaldo, y autor de libros y artículos cuyos títulos no parece necesario recordar aquí. Nacido en Tánger en 1871, tenía por lo tanto unos treinta y cinco años cuando el viaje de Galdós a Marruecos en 1904. Desde 1890 Ricardo Ruiz Orsatti ejercía de intérprete al servicio de los organismos diplomáticos y consulares de España y de Rusia en Tánger y en Tetuán. En 1907, fue nombrado director de la escuela hispanoárabe de Tánger y en 1916 inspector general de la enseñanza hispanoárabe en Marruecos (zona española), cargo que ocupó hasta el año de 1924 y que le llevó a publicar en Tetuán, el año de 1918, una obra titulada La Enseñanza en Marruecos (la biblioteca de la Escuela de Estudios Árabes de Madrid conserva un ejemplar de esta obra legado por D. Miguel Asín y dedicado a D. Julián Ribera). En este libro, evocando el recuerdo de los españoles ilustres que pasaron por Tánger, escribe las líneas siguientes: «Podríamos dedicar un párrafo a nuestro venerado amigo el gran don Benito Pérez Galdós, que aquí estuvo y nos honró en demasía aceptando unos apuntes nuestros para su Aita Tettauen» (pág. 144).185

En efecto, las cartas que siguen confirman lo que ya sabíamos por el artículo que el mismo Ruiz redactó para un número extraordinario de La Gaceta de África de Tetuán dedicado a la obra de España en Marruecos, publicado en enero de 1935, y del que tuve yo ocasión de ocuparme a raíz de su publicación.186 A principios de 1901, cuando supo, por La Correspondencia de España, que Galdós proyectaba insertar en sus Episodios Nacionales un relato de la guerra de 1859-1860 hecho desde el punto de vista marroquí, Ricardo Ruiz Orsatti le ofreció su colaboración de especialista y le mandó espontáneamente la traducción castellana de un capítulo de la «Historia de   —100→   Marruecos» del Nasiry (cf. aquí las cartas núm. 1, de 17 de febrero de 1901, y núm. 2, de 4 de junio de 1901). Vemos por su carta de 7 de julio de 1901 (núm. 3) que Galdós sólo le acusó la recepción de su envío el día 3 de julio y sin duda porque el mes anterior (carta núm. 2) Ruiz Orsatti le había extrañado cortésmente su largo silencio. Desde entonces hasta la primavera de 1905 no se interrumpe casi la correspondencia entre Galdós y el arabista tangerino. El 7 de julio de 1901 (carta núm. 3), poco antes de emprender un viaje a Rusia, éste remite al escritor un artículo publicado por él acerca de Tetuán y varias informaciones sobre el norte de Marruecos y la lengua árabe. La carta núm. 6, de 18 de setiembre de 1902, nos revela que ya en aquella fecha proyectaba Galdós el viaje a Marruecos que sólo pudo realizar dos años después, en octubre de 1904, como lo sabemos por otra parte187 y como lo vemos por la carta de 29 de setiembre de 1904 (núm. 7). A consecuencia del estado del mar, Galdós no logró ir a Tetuán: el viaje tenía que hacerse por barco, porque la dificultad y sobre todo la inseguridad de los caminos no permitían otra cosa. Las cartas 9, 10 y 11, de 18-19 de octubre de 1904, que le presentan a varias personas de allí, nos recuerdan aquel viaje frustrado. Pero no cabe duda que las cartas más importantes de la colección son los núms. 12, 13 y 15, de 27 de octubre de 1904, 15 de enero de 1905 y 23 de febrero de 1905 respectivamente. En ellas, Ricardo Ruiz Orsatti comunica a Galdós una porción muy notable de datos e informaciones sobre Tetuán y su comarca, sobre el calendario musulmán, sobre los usos e instituciones marroquíes, etc., que para nosotros tienen el interés suplementario de referirse muchas veces a una situación ya desaparecida.

Es imposible comentar de modo pormenorizado estas cartas, que podrán utilizar con toda facilidad lo mismo los galdosistas como los especialistas de Marruecos.188 Además ello nos llevaría a repetir observaciones y conceptos ya emitidos hace tiempo.189 Nos limitaremos a unas breves conclusiones, sobre todo desde el punto de vista galdosiano. La primera cosa que nos llama la atención, con las cartas de 1901 (números 1, 2 y 3), es la siguiente: aunque Aita Tettauen fue escrito de octubre de 1904 a enero de 1905, según las fechas puestas por el mismo Galdós al final del relato -y que corroboran las demás informaciones-, se ve que el proyecto era mucho más antiguo y que el gran novelista canario planeaba con mucha anticipación la organización de cada serie de sus Episodios. Es posible, sin embargo, como lo apuntamos en una nota, que una frase de Ruiz Orsatti en su primera carta le haya sugerido la idea de dedicar un tomo a la intentona carlista de la Rápita, enlazándola, como lo hizo, con la guerra de Marruecos -lo que le ayudó a «salir del paso», según dijo él, pues la guerra le proporcionaba materia mucho más copiosa que el pronunciamiento del general Ortega.190 La segunda cosa que debemos poner de relieve es que, de las tres principales cartas de Ricardo Ruiz Orsatti, que son los núms. 12, 13 y 15, sólo llegó aún a tiempo para Aita Tettauen la primera, fechada en 27 de octubre de 1904. Era un contratiempo frecuente cuando Galdós elaboraba sus obras. Siempre trabajaba con prisa, y muy a menudo no aguardaba los datos solicitados o prometidos. Por ejemplo, su correspondencia con el novelista catalán Narciso Oller, publicada hace poco por el profesor Shoemaker, nos ha revelado que renunció, por no haber podido esperar, a las informaciones pedidas a éste para la representación de La loca de la casa.191

A consecuencia de lo dicho, la colaboración de Ruiz Orsatti no le sirvió del mismo modo para los dos Episodios. Para Aita Tettauen, utilizó sobre todo el texto del Nasiry, puesto que su colaborador se lo remitió traducido ya en febrero de 1901 (cartas núms. 1 y 2), y aprovechó un poco la carta de 27 de octubre de 1904 y hasta   —101→   la de 15 de enero de 1905, que le permitió aún rectificar algunos errores al final del Episodio.192 Para la primera parte de Carlos VI en la Rápita, episodio fechado en abril-mayo de 1905, pudo utilizar -y de hecho utilizó copiosamente- las cartas núms. 13 y 15, de 15 de enero y 23 de febrero de 1905. Leyendo el texto de Galdós, sorprende enseguida la abundancia de datos sacados de las cartas de Ruiz Orsatti: si cotejamos los núms. 13 y 15 de la colección con los capítulos I-XII de Carlos VI, nos damos cuenta de ello inmediatamente. En el cap. II, por ejemplo, la palabra mazzal, que los judíos de Marruecos emplean para decir «suerte», procede de la carta núm. 15 de Ruiz, y a continuación Galdós reproduce textualmente un refrán hebreo citado por éste en la misma carta: «Daca un cuajito de mazzal y tírame a las fondinas de la mar». Resultaría muy fácil multiplicar las observaciones de este género.193 Pero lo que sorprende también, y todavía más, es la rapidez con que Galdós consiguió asimilarse los datos proporcionados por su informador y la destreza con que los engastó en su relato, de tal modo que aparecen de la manera más natural y sin dar la impresión de un agrupamiento artificial. Procedió, pues, como había procedido ya con las informaciones de Navarro Ledesma sobre Toledo y la Sagra para Ángel Guerra.194 Aunque Carlos VI en la Rápita no figura entre las mejores producciones de Galdós, esta habilidad nos revela una vez más la mano soberana de un maestro que dominaba su oficio con perfección asombrosa.

*  *  *

Las cartas de Ricardo Ruiz Orsatti no presentan ninguna dificultad: la letra es clara y elegante, y se lee sin esfuerzo. Como es natural, las he reproducido con toda fidelidad, respetando sus pocas particularidades ortográficas; sólo de vez en cuando, para mayor claridad me he permitido alguna ligera modificación en la puntuación o en los acentos. En cuanto a las notas puestas en pie de página, no pretenden ni podían agotar todos los puntos y pormenores que aparecen en el texto. Quedaba fuera de mi competencia y resultaba a la vez innecesario y desproporcionado incluir en el comentario una disertación histórica, arqueológica y lingüística sobre el norte de Marruecos y en especial sobre Tetuán. Las referencias que doy permitirán a los lectores curiosos ampliar sus conocimientos en este campo. Lo mismo diré de las citas y referencias que da Ruiz Orsatti y de los personajes que menciona. No todos han salido identificados, pero se trata de detalles de escasísima importancia, o bien el mismo Ruiz proporciona indicaciones bastante precisas para que el investigador pueda llevar adelante sus búsquedas personales.195

La Sorbona. París


1

Tánger, 17 de Febrero de 1901.

Señor Don Benito Pérez Galdós,
Madrid.

Muy respetable Señor mío:

Enterado, por haberlo leído en «La Correspondencia de España», que tenía V. el propósito de publicar, como continuación a sus interesantísimos Episodios Nacionales, un relato de la   —102→   Guerra de Tetuán desde el punto de vista marroquí, me permito ofrecer a V., como una muy pequeña prueba de admiración, la traducción hecha sin ninguna pretensión literaria, que va adjunta, de un capítulo de la Historia de Marruecos del Nasiry que a tal asunto se refiere y en el que tal vez halle V. algún dato utilizable.

En la misma obra dedica el autor otro capítulo al famoso Rugui, curiosa coincidencia ocurrida en aquella época de un pretendiente al trono xerifiano que se levantaba en armas contra su natural señor el Sultán Sidi Mohammed, al propio tiempo que en España se sofocaba en San Carlos de la Rápita la intentona carlista que trataba de destronar a doña Isabel Segunda.196

Si cree V. que puede convenirle para su propósito, tendré una verdadera satisfacción en ponerlo a su disposición.

Ruego a V. dispense la libertad que me tomo y crea en la devoción que le profesa su admirador y seguro servidor,

Q. l. b. l. m.
Ricardo Ruiz
(rúbrica)

Drogmán de la Legación Imperial de Rusia




2

Tánger, 4 junio de 1901.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Muy respetable señor mío:

Hace ya tiempo tuve el honor de enviar a V. la traducción de un capítulo de la Historia de Marruecos del Xej Ahmed El Nasiry Selaui referente a la Guerra de Tetuán del año 1859, por si pudiera servir a V. de alguna utilidad, y como no he tenido la satisfacción de que me acusara el recibo del mismo, en la duda de si lo habrá V. o no recibido, aunque iba en paquete certificado, me permito molestarle suplicando a V. tenga a bien decírmelo, para en caso necesario hacer la reclamación a correos.

Aprovecho esta ocasión que me proporciona el honor de repetirme a V. muy atto. y devoto admirador y s. s.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)




3

Tánger, 7 de Julio de 1901.

Señor Don B. Pérez Galdós.

Santander.

Muy respetable Señor y distinguido amigo: Acabo de ser favorecido con su muy atenta del 3 y me apresuro a contestar a V., porque, debiendo salir mañana para San Petersburgo llamado por el Gobierno Imperial, no quiero dejar de escribir a V., aunque sea a vuela pluma, para tener la satisfacción de dar a V. los detalles que se sirve V. pedirme.

En unos apuntes de una Escursión a Tetuán que publiqué en dos números de «Alrededor del Mundo», cuyos ejemplares tengo el honor de incluir, hallará V., si se toma la molestia de   —103→   repasarlos, algunos apellidos de los principales moros oriundos de España y otros detalles referentes a los mismos. A esos apellidos se pueden agregar los de El Jetib, El Lebbady, El Delleso, El Zorby, El Ghalmia, también de distinguidas familias tetuaníes, granadinas de abolengo.

De varios modos dicen los moros Guerra de Tetuán. Aita Tettauen es el más y mejor usado; dicen también Harb Tettauen, y también con frecuencia: «Aita maa el sbaniul»: guerra con el español.

A la guerra contra los infieles o sea la guerra santa llaman los árabes Yahad y a los guerreros que toman parte en ella Muyahidin (pronúnciase la Y en ambas palabras como la j francesa o catalana; la h se aspira suavemente, como en la palabra inglesa home [home]). A mi vuelta de Rusia tendré el gusto de escribir a V. más detenidamente sobre la pronunciación figurada de las palabras árabes de uso frecuente en español, que transcriben en España tanto en libros como en periódicos y documentos oficiales con la ortografía francesa o inglesa, diciendo, por ejemplo, Hadge (peregrino a la Meca) cuando debería escribirse, por ser más aproximado a la verdadera, Hach; o Anghera, en vez de escribir Anyera; Ouad o Wad, por Uad (río), etc. Me permito enviarle a V. un ejemplar de una obrita de mi hermano Reginaldo por si en ella puede V. encontrar algo que pueda serle útil para su trabajo.197

Rogando a V. me mande siempre y como guste me repito de V. muy atto. s. s. y devoto admirador q. l. b. l. m.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)




4

Una tarjeta postal con fotografías de Tolstoi y con la dirección siguiente: «Señor don Benito Pérez Galdós -Villa San Quintín- Santander (Espagne)». El texto dice así: «Desde la patria del gran ruso saluda al gran español su más devoto admirador que le besa la mano. -Ricardo Ruiz (rúbrica)». El matasellos del correo ruso lleva la fecha de San Petersburgo, 26 de julio de 1901.




5

(Texto escrito a máquina)


Tánger (Marruecos), 1 de julio de 1902.

Señor don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Muy respetable señor mío y de mi consideración más distinguida: En la cubierta de «Las Tormentas del 48», primer tomo de la cuarta serie de sus monumentales Episodios Nacionales, he visto anunciado «Aita Tettauen». Otra vez en ésta de vuelta de mi viaje a Rusia, me apresuro a ofrecerme a V. para todo aquello que V. me crea útil, estando incondicionalmente a su disposición, para suministrarle todos los detalles que V. crea necesarios para la preparación de la historia de la guerra de Tetuán desde el punto de vista marroquí.

Con tal motivo le reitera a V. su admiración su más atento servidor y amigo que le besa la mano,

Ricardo Ruiz
(rúbrica)



  —104→  
6

Tánger, 18 de Septiembre 1902.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Santander.

Muy respetable Señor y amigo:

A su tiempo fui favorecido con su muy atenta del 18 julio, y, como me fue preciso ausentarme por aquellos días de Tánger, hasta mi vuelta no he podido ocuparme de cumplimentar el encargo con que me honra.

He encontrado lo que V. necesita y desea: Una casa de hebreos de la clase media donde podrá V. vivir en familia con más holgura y libertad y mejor atendido que en un hotel. De precio nada he hablado, porque prefiero que se entienda V., llegado el momento, con sus hospederos en la seguridad de que quedará V. satisfecho. Únicamente ruego a V. me avise quince días, por lo menos, antes de su venida, para que en caso preciso pueda buscarle otro alojamiento si el que hoy he comprometido -sin compromiso para V.- no estuviera, por cualquier circunstancia, libre para entonces.

Creo haber interpretado bien sus deseos. Vea V., pues, en que más puede serle útil, en la inteligencia de que en ello tendrá un verdadero placer su más atento amigo y admirador que le besa la mano

Ricardo Ruiz
(rúbrica)




7

Tánger, 29 Septiembre de 1904.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Mi muy respetable amigo: Con el mayor gusto me apresuro a contestar a su muy atenta del 25. ¿No me he de acordar de V., si soy uno de sus más convencidos admiradores?

En Tánger podrá V. permanecer todo el tiempo que a V. convenga. La tranquilidad aquí es completa. La paz (de los espíritus) no es turbada más que por unos cuantos cultivadores de «fantasías moriscas», que de vez en cuando alarman a la opinión por medio de la prensa, para justificar de alguna manera su fama de intrepidez temeraria, o para fines menos inocentes. Ya tendrá V. ocasión de conocer algunos tipos de esta especie, pues la especie abunda en ejemplares por aquí.

En todas las demás poblaciones del Imperio la tranquilidad es, como en Tánger, completa. En los caminos, es decir, en el campo, relativa. Así es que para ir a Tetuán no sería prudente hacer el viaje por la vía terrestre, como en otros tiempos menos inquietos. Hay que ir por mar, y seguramente en los días que V. permanezca aquí no faltará ocasión de realizar el viaje en alguno de los vapores que con frecuencia hacen esa escala. En último caso y si, lo que no es probable, no hubiera en todo ese tiempo vapor directo, entonces habría que hacer el viaje a Ceuta desde aquí, para tomar en aquella plaza una barca, que en algunas horas (4 o 5) lo llevaría a Río Martín. De allí a Tetuán, 10 kilómetros que se recorren a caballo y en toda seguridad.

En cuanto a alojamiento, yo tendré un verdadero placer en que V. tenga a bien aceptar en mi casa un modesto cuarto, y un plato, también modesto, pero limpio, en mi mesa. Y esto tan sin   —105→   cumplidos y a la pata la llana, que si a V. no conviniera, con idéntica llaneza me lo había de manifestar, para que juntos buscáramos mejor acomodo. A su criado no faltará donde alojarlo cerca de casa y en buenas condiciones. Para evitar molestias en esta Aduana al pasar el equipaje y otros inconvenientes, además del gusto que yo tengo en ir a esperar a V., le ruego me avise con anticipación el día fijo de su llegada a ésta. El vapor «Piélago» llega a ésta los lunes, miércoles y viernes de Cádiz, al mediodía, y los martes, jueves y sábados de Algeciras, a las 10, saliendo de ambos puertos para éste a las 7 de la mañana. Para que V. me conozca enseguida iré yo en el bote de la Sanidad.

Mande siempre con toda franqueza a su más atento amigo y admirador q. l. b. l. m.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)




8

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Mi muy respetable amigo: Esta tarde a las 2 llega a ésta el nuevo Ministro de Austria y tendré que ir al muelle para saludarle. Si V. quiere presenciar la recepción que le hacen las autoridades moras a la cual asiste Torrés (es cosa de unos minutos), yo pasaré a recoger a V. al hotel un cuarto de hora antes, para desde allí ir después sin testigos inoportunos a ver al Gobernador, Abensur, etc.

Siempre de V. el más atento amigo y admirador,

Ricardo Ruiz
(rúbrica)

Jueves 13-X-904.198




9

18-10-904

Tanger (Maroc)

Légation de Russie

Excmo. Señor

Don Francisco Fernández Bernal,
etc., etc., etc.,

Mi respetable Señor y amigo: La persona que le entregará esta tarjeta es don Benito Pérez Galdós. Su nombre ilustre es suficiente recomendación, por lo cual yo me limito a tener la honra de presentárselo a V., en la seguridad de que complacerá en cuanto pueda al futuro autor de Aita Tettauen. -Julia me encarga cariñosos recuerdos a su Señora e hija (c. p. b.) y yo le suplico me crea su más atento servidor y respetuoso amigo q. l. b. l. m.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)199



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10

Tanger (Maroc)

Légation de Russie

Mi querido Pepe:

El portador es Don Benito Pérez Galdós. Su nombre y representación hacen innecesarias toda clase de recomendaciones. Me limito, pues, a presentarte a mi respetable amigo en la seguridad de que harás cuanto puedas para que su estancia en ésa le sea grata y útil al fin que persigue su paso por esa plaza. Complacerás con ello muchísimo a tu pariente

Ricardo
(rúbrica)

Nuestros cariñosos recuerdos a Matilde.

Tánger, 18 Oct. 1904.




11

Hotel Cecil

Tangier, Morocco

Telegraphic Address

«Cecil, Tangier»

19 Octubre 1904

Señor Don Isaac Toledano.

Tetuán.

Mi querido amigo: El ilustre escritor español Don Benito Pérez Galdós tiene el proyecto de ir a pasar unos días en Tetuán con objeto de completar algunos datos para su futura producción Aita Tetauen (sic). Yo escuso recomendarte al portador porque su nombre es suficiente para un entusiasta como tú. Sirva pues ésta solamente como presentación, en la seguridad que yo tengo de que harás por mi respetable amigo cuanto puedas para que su estancia en ésa le sea grata y útil su paso por la santa ciudad de Sidi Saidi.

Un abrazo de tu buen amigo

Ricardo Ruiz
(rúbrica)200




12

Tánger, 27 de Octubre de 1904.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Mi respetable amigo: Se me había ocurrido que renunciaría V. a su proyectada escursión a Ceuta y Tetuán, porque, si el tiempo era malo el día que V. se marchó, en los siguientes se desencadenó un furioso temporal y hubieran sido una temeridad atravesar el Estrecho. Después de todo y como V. dice muy bien, no hubiera compensado las relativas bellezas de la ciudad santa de Sidi Saidi a las positivas molestias que había V. de sufrir antes de llegar a ella.

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Me he apresurado a cumplimentar su encargo; hoy mismo he escrito a mi cuñado para que devuelva a V. el pliego que habrá llegado a su poder esplicando al propio tiempo las circunstancias que a V. impidieron ir a Ceuta, con el ruego de que así lo haga saber al general señor Bernal.201

Y vamos a lo que interesa. Es un error muy generalizado -tanto que yo también he incurrido en él en cierta ocasión por no fijarme- el que comete Ros de Olano al afirmar que Tettagüen significa Abre-ojo. La ciudad de Tetuán fue fundada o por lo menos reedificada por tribus rifeñas a mediados del siglo XV y su nombre en lengua de esos kabileños, que no en árabe, significa Ojos de manantiales.202 He aquí la razón: la primera sílaba de ese nombre, o sea Tet, que los rifeños pronuncian Tit y escriben (tit), significa Ojos, plural de ojo; y las dos restantes, o sean auen, que los árabes escriben (aiun) y los rifeños (auin), tanto en uno como en otro idioma quieren decir manantiales o fuentes. Además de esa razón, tengo otra para creer que la etimología ésta sea la verdadera, y es que hay en efecto en Tetuán gran número de fuentes, y uno de sus barrios se denomina El-Aiun. Así pues (Titauin) escriben los rifeños, pero los árabes pronuncian (subrayado en el original) «Tettauen», y yo de este último modo lo transcribiría, porque el árabe tiene la fuerza de dos t.t. nuestras.

Ya sabe V., mi respetable amigo, que a mí no me molesta V. en lo más mínimo, antes al contrario, además de satisfacción, es para mí un honor insigne el que me utilice en cuanto quiera.

Lo que sí me apura y me cuesta trabajo es la necesidad en que me veo de pedir a V. un grandísimo favor, no para mí, pero para un amigo mío a quien desearía con toda mi alma poder servir. Se trata del señor Lúgaro, a quien yo tuve el gusto de presentarle en ésta. Es un pobre hombre, muy bueno, muy servicial, y con una carga de familia a mantener. A estas condiciones reune la de ser muy versado en las cosas y quisicosas de este país, de conocer como nadie la política marroquí y de poseer una actividad increíble y muy valiosas relaciones en el Imperio. Era hasta hace dos meses corresponsal de «El Imparcial» y por una causa que desconozco, pero que estoy seguro, porque conozco al hombre, no puede afectar en nada a su buen nombre, fue sustituido, según tengo entendido, con carácter de interino (subrayado en el original), por otro que no es posible pueda elevarse a la altura que el crédito de ese periódico exije. Y el favor que yo deseo merecer de V., si es que ello es factible, consiste en que, si no hay inconveniente serio, V. consiga del señor Gasset la restitución en su cargo de un hombre de cuyo españolismo y honradez respondo, no yo solamente, sino la Legación de España, la Comisión Militar Española y todos los elementos sanos -por desgracia poco abundantes- que aquí tenemos. Si V. puede conseguir esto hará V. una obra meritoria para la nación. -Usted que tantas tiene ya hechas-, para «El Imparcial» y para una familia honrada.203

Ricardo Ruiz
(rúbrica)




13

Tánger, 15 de enero de 1905.

Señor don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Mi muy respetable y querido amigo: Recibí oportunamente la siempre grata de V. fecha 19 del pasado diciembre y no contesté enseguida por haber estado sumamente ocupado en un trabajo extraordinario primero y luego por haber tenido que guardar cama unos días a causa de un fuerte ataque de gripe. Hoy ya restablecido, desocupado y provisto de los datos necesarios me apresuro a escribirle, no sin rogar a V. disculpe mi forzado silencio.

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Vamos por partes:

El nombre que adjudica V. a su héroe tiene un defecto de construcción. Hach es título que se da a todo aquel musulmán que ha hecho la peregrinación a la Meca y va siempre precediendo al nombre propio del individuo que tiene derecho a usarlo. No es corriente su uso entre renegados, porque tal vez no exista ninguno que por haber efectuado el viaje a que aludo pueda tener ese derecho. Por otra parte, los individuos que abrazan el islamismo reciben generalmente el nombre de Abd-Al-lah (Siervo de Dios) u otro de los atributos de Dios, v. g. Abd-El-Uahed (Siervo del Único), Abd-El-hatif (Siervo del Benigno), Abder-rahman (Siervo del Clemente), etcétera. No llevan estos individuos apellido y sus hijos adaptan para este caso el nombre propio del padre, interpolando entre uno y otro el Ben (hijo), que es tanto como antiguamente entre nosotros el ez y entre los rusos el itch, con la diferencia que nosotros y los rusos lo usamos como afijo y los árabes como prefijo. Así pues su renegado podría llamarse correctamente Abd-Al-lah, etc., o, si V. quiere, Sid Abd-Al-lah. Si le quiere adornar con el Hach, entonces deberá V. decir Sid El Hach Abd-Al-lah y el apellido que V. quiera siguiendo al nombre.204

Para que no haya lugar a confusión y por si se ve V. en el caso de ampliar la materia, no solamente le daré a continuación el equivalente de los meses de enero y febrero de 1860, sino la correspondencia de todos los meses del año 1276.

Meses Musulmanes del año 1276 corresponde
El 1.º de Moharram » al 31 julio 1859
El 1.º » Safar » al 30 agosto 1859
El 1.º » Rabia el auel » al 28 septiembre 1859
El 1.º » Rabia et-tsani » al 28 octubre 1859
El 1.º » Yumad el auel » al 26 noviembre 1859
El 1.º » Yumad et-tsani » al 26 diciembre 1859
El 1.º » Reyeb » al 24 enero 1860
El 1.º » Xaabán » al 23 febrero 1860
El 1.º » Ramadán » al 23 marzo 1860
El 1.º » Xaual » al 22 abril 1860
El 1.º » Dul Kaada » al 21 mayo 1860
El 1.º » Dul Hedcha » al 20 junio 1860

El 1.º de enero de 1860 corresponde, pues, al 7 de Yumad et-tsani de 1276, y el 1.º de febrero al 9 de Reyeb.

La invocación más generalizada en los libros musulmanes es la siguiente:

(Bi ismi Al-lah Er-rahman Er-rahim). (En nombre de Dios El Clemente, El Misericordioso).

También se emplea en unión de la anterior o aislada ésta:

(El Hamdu lil-Lah).
(Loor a Dios).

Con estas dos fórmulas empieza el Korán y todos los capítulos en que está dividido, excepción hecha del IX. Por esto, antiguos y modernos, todos los autores la usan en sus escritos como fórmula de introducción.

Por último, los moros dan a la puerta de Tetuán que nosotros denominamos de Fez el nombre de Bab En-nuader.

Bab Et-tsuts, a la del Cid.

Bab Er-remmús, a la de los Reyes Católicos.

Bab El-oocla, a la de la Reina.

Bab Es-saida, a la de S. Fernando.

Bab Edchiaf, a la de Alfonso VIII.

Bab El Mcabar, a la de la Victoria.

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A la plaza de España llaman ellos El Feddán (El Daucal), a la del Teatro, El Gurna (por el matadero que allí existía. Hoy se hallan ahí el consulado español, la iglesia y la casa misión de franciscanos), a la de Pamplona, Garsa Es-seguira, también la llaman Sok El Juts por el mercado de pescado o pescadería que hay actualmente en ella, a la de Sevilla, Garsa El Kibira (Huerta grande, por oposición a la anterior, cuya traducción es «huerta chica»).

El barrio hebreo es llamado por los moros El Mel-laj, es decir lugar salado, con la misma acepción despectiva que entre nosotros tenía el lugar que era arrasado y salado en la edad media en guisa de exterminio y maldición. No recuerdo más que los nombres de dos barrios de la Judería: al uno le llaman El Prado y al otro Meca.

Los principales lugares marcados en el plano son: «Campo de los juegos militares núm. 29 y Picadero núm. 28», que hoy se llaman El Gurna (matadero). «Hórreos de la Administración Militar» es entre los moros la Rahba o mercado de cereales. «El jardín del Santo» es conocido entre los moros por «Dar El Conde», porque en ella, es decir en la casa que hay en él, habitó el famoso aventurero contemporáneo y aun creo que Ministro de Felipe V, Barón o Duque de Riperdá.205 Hoy y desde mucho antes de la guerra vive en ella la familia del venerado santón Sidi Ali Berraisun, tío del tan traído y llevado Raisuli secuestrador de Perdicaris.206 «El solar designado para la edificación de la casa consular», etc., es el Feddán de Lebady (Daucal de Lebady).

Calles: a la del Rey llaman los moros Kaiseria; a la de Chiclana, El Haddadin; a la de Cantabria, Trankats; a la de Barbastro, Caid Hamed; a la del Darro, Muley Abdelkader Yilali; a la de África, Emtamar. En árabe, calle se dice «Zanka» o «Zankats». Generalmente, en todas las poblaciones de Marruecos, las calles llevan el nombre del más caracterizado de sus vecinos o del edificio más notable si lo hay en ella. V. g. a la calle donde está la Mezquita Principal llaman: Zankats Yama El Kibir; a aquella donde vive o tiene su tribunal koránico el Juez: Zankats El Kadi, etc.

No sé si he satisfecho sus deseos, pero no dude V. un momento en escribirme si algo más se le ocurre, pues ya sabe V. que con ello me proporciona un grandísimo placer. Me permito ofrecer a V. unas vistas de Tetuán por si pudieran ser de alguna utilidad para V.

Agradezco a V. muchísimo el interés que se sirvió tomarse en el asunto de que le hablaba en mi última referente a mi amigo el señor Lúgaro. Hoy ya no aceptaría la corresponsalía de «El Imparcial» aunque para ello fuera solicitado, porque ha sido nombrado recientemente corresponsal en Marruecos de la importante agencia «Central News». Puede estar satisfecho «El Imparcial» de su elección. Que compare, entre mil, la última noticia de su corresponsal actual informándole del notición inventado en el soco chico de Tánger por un guasón, referente a la proclamación en Marrakech de un Muley Hafid, canard que acojieron otros corresponsales tan listos como él para dar un nuevo motivo de alarma y un nuevo pretexto para hacer el juego a los extraños con perjuicio nuestro. En eso como en otras muchas cosas andamos por aquí a la zaga de los demás, y gracias al poco tacto en la elección de las personas lo que conseguimos es desacreditamos, perder cada día algún girón de nuestro maltratado prestigio y hacer el caldo gordo a los demás, inconscientemente, la mitad de las veces. No continuaré, porque en este diapasón pierdo los estribos ante tamaño desbarajuste.

Reciba muy afectuosos recuerdos de mi mujer y ya sabe V. que dispone incondicionalmente de su devoto admirador y amigo

Ricardo Ruiz
(rúbrica)

P. D.

Abensur y otros amigos desean hacer unas ampliaciones del adjunto grupo y me encargan suplique a V. tenga la bondad de pedir a Victoriano que nos mande la placa (subrayado en el original).207 Le anticipa un millón de gracias en nombre de todos su más atto. amigo y s. s.

Ruiz



  —110→  
14

Tánger, 17 Febrero de 1905.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Mi respetable y muy querido amigo: El objeto primordial de la presente es el de presentar a Usted a mi distinguido amigo Señor de Kolemine, Secretario de la Embajada Rusa en ésa, muy hispanófilo y gran admirador de V.208

En su afición a las cosas de España ha entrado por mucho la lectura de sus obras de V. a quien tiene vivísimos deseos de conocer personalmente, y yo me considero muy feliz con poder -gracias a la benévola amistad con que V. me honra- servir de intermediario entre ambos. Reciba V. por adelantado las más expresivas gracias por las atenciones que tenga para mi recomendado, y, con muy afectuosos recuerdos de mi mujer, Usted sabe que le quiere mucho y le admira su más atento servidor y amigo

Ricardo Ruiz
(rúbrica)

P. D.

Recibo su favorecida del 11, que contestaré esforzándome por complacer al maestro insigne.209

Vale.




15

Tánger, 23 de Febrero de 1905.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Madrid.

Mi muy respetable y querido amigo:

No tuve paciencia para esperar el ejemplar que V. me anuncia y que yo le agradezco como regalo inapreciable, y adquirí otro de «Aita Tettauen». Acabo de leerlo de un tirón. Me parece imposible que haya quien pueda sustraerse al encanto e interrumpir la lectura. Es usted demasiado severo e injusto consigo mismo en su siempre grata y favorecida del 11. Yo no lo juzgo a V. porque ni tengo méritos ni condiciones, ni me deja para ello espacio la admiración, pero en cuanto se refiere al orden de mis modestos conocimientos, sí he de decirle que en ninguna, así como suena, en ninguna obra los he visto tratados tan de mano maestra. Es exactísimo e inimitable el lenguaje que Usted pone en boca de los judíos tetuaníes. Perfecta la literatura oriental del Nasiry. Los giros, las frases, las invocaciones de éste son de una asimilación acabada. Estoy seguro que no le escasearán sus elogios por este concepto nuestros distinguidos orientalistas. Los errores en nombres de calles o puertas son tan sin importancia que no hay que mencionarlos, aparte de que ya los corrije V. al final.210

Le diré a V. en contestación a su amable carta y como continuación de mis anteriores datos: El Guad El Jelú no existe más que en nuestros libros o cartas geográficas. Los indígenas en su conversación y en su literatura le llaman (en su desembocadura) Uad Martín. Lo de Jelú, a mi modo de ver, debe obedecer a que alguien, en tiempos de nuestra campaña o antes, preguntaría a algún moro el nombre del río. El indígena comprendería mal y contestaría refiriéndose al agua (no al río): Jelú, que quiere decir dulce, y de allí el error tan generalizado. No me lo explico de otro modo. Digo antes que le llaman Río Martín en su desembocadura,   —111→   porque en su no largo curso recibe otras denominaciones: Emgaz el jayar (Vado de las piedras) se llama frente a Beni Madán, Emhannech frente a Tetuán; un kilómetro más arriba recibe un afluente que se llama Quitan. Este riachuelo tiene la particularidad de que en su curso mueve un centenar de molinos harineros situados en un delicioso valle, y su origen es un pequeño lago que se halla en las montañas de Beni Hozmar, de aguas tan límpidas y cristalinas que por su color azul le llaman Zarca. Es lugar muy frondoso y poético. El Río Martín recibe también el nombre de Busfiha (nuestro Buceja) en el llano de Uadrás. Fíjese bien en este nombre; nosotros le llamamos Wad-Rás y hasta tenemos un regimiento con ese apelativo, pero debemos decir Uadrás, sin guión y sin doble V, y la mejor prueba de que es así es que a los tribularios de aquella kábila les llaman Uadrasi y no drasi como en el otro caso sucedería.

En la falda de la escarpada Sierra Bermeja se halla la aldea de Samsa, y, como creo que tendrá V. ocasión de hablar de ella, le diré a V. las particularidades más salientes. Muy cerca de ella existe un manantial de agua cristalina que brota abundante en todo tiempo por entre las peñas de Sierra Bermeja. Estas aguas tienen tal cantidad de cal (o lo que sea) que las cañas, caracoles, raíces y hojas que halla a su paso las petrifica en muy poco tiempo. Yo he cogido en este arroyuelo una hoja de yedra mitad aún fresca y la otra mitad, por estar dentro del agua, con una capa caliza como la cáscara de un huevo. En la falda de la sierra, a poco más de un kilómetro, hacia el Norte, de la aldea, hállase una gruta o mejor dicho una especie de túnel que perfora la montaña en un trecho de más de medio kilómetro. He penetrado con gran dificultad en él, y, aunque su forma me haga creer que aquello puede ser una galería abierta por la mano del hombre para explotar el subsuelo, no hallo vestigio de ello en ningún libro ni recuerdo queda por tradición entre sus vecinos.

En Hal-lila, aldea que se halla a unos cinco kilómetros al Sud Este de Tetuán entre Beni Hozmar y Beni Madán, se crían unos melocotones célebres en todo Marruecos por su esquisito sabor y aroma. En Quitan se crían las famosas naranjas que salen de allí en cantidades de 10 a 15 millones todos los años con destino al extranjero. Las peras meski o moscateles son riquísimas y se crían en las huertas que rodean a Tetuán, así como las uvas moscateles de la campiña tetuaní y sobre todo las de Dar Murcia que son por lo menos iguales a las de Alicante o Málaga. El río Quitan da abundantes y ricas truchas que pescan, pero no comen los moros, por carecer de escamas (subrayado en el original). A raíz de la guerra, una compañía española explotó la cría del algodón con magníficos resultados en cuanto a la tierra y clima podía exigirse, no así en cuanto al apoyo que tales empresas necesitan por parte de las propias autoridades para su desarroyo (sic). En Beni Said, detrás de Beni Madán, he visto hace algunos años algunas plantas de dicho textil que crecían allí sin cultivo, reproduciéndose espontáneas. Creo que el valle de Tetuán sería muy apropósito parte para el cultivo de la caña de azúcar y parte para el del arroz.

Río Martín es el puerto natural de Tetuán, de la cual dista unos diez kilómetros. Del Rif afluyen cárabos, casi todos de la kabila de Beni Uriaguel, algunos de Bades y otros de Gomara, y a cambio de madera de alerce, cebada, sandías, miel riquísima, etc., se llevan de Tetuán telas de algodón, azúcar, hierro viejo (para fabricar azadas, arados y otros aperos de labranza), té, fusiles, etc.

Tetuán surte también de los productos de la industria europea, necesarios a los moros, a Xexuán, población que se halla a unos 60 kilómetros de Tetuán en la montaña de Beni Hassán y el Jmás, al Sur de Beni Hozmar. Aquella población es de las más fanáticas del Imperio, y el único europeo que pretende haber estado en ella es Foucauld vestido de judío.211 Estos (los judíos), en el Rif, el Atlas y otras regiones habitadas por Xlojs viven en servidumbre. Cada individuo o familia tiene su señor, y éste, a cambio de la guezia o capitación y otros servicios, es protegido por el señor contra las rapacidades de los correligionarios de éste. Entre los rifeños, por esta causa, los judíos son conocidos por el judío de fulano y no por sus nombres. Para el moro, el judío es Demmi o individuo de un pueblo sometido. Para el judío, el moro y en general todos los no israelitas son Goi (creo que el plural es Goim).

Palabras del castellano anticuado o de árabe españolizado de uso corriente entre los judíos de Tetuán: La Meará (el cementerio). -La joyerá: el escusado. -Alasba: jovencita. -Fidiondo:   —112→   podrido. -Niscaliá: mujer pública. -Forno: homo. -Tener el meollo huero: estar loco. -Preto, Preta: Negro, Negra. -Mazzal: suerte. Tienen un refrán que dice: «Daca un cuaxito de mazzal y tírame a las fondinas de la mar». Es decir: Dame un pedacito de suerte y tírame al fondo del mar.212 Maldiciones: Te venga el mal de la cabra: cuerno, sarna y barba. -Te veas como el vapor: con agua en los lados y fuego en el corazón. -Te veas como el café: tostado, molido, bebido y meado. -Te venga un mal que te leve. -Hijo de la baraniddah enconada (hijo concebido durante la menstruación de la madre). Bendiciones: Te haga el mazzal como esa cara pintada. -No me alte tu jiar. -Así te dé el Dió un azri (a una mujer encinta deseándole hijo varón). -Varias frases: El Dió se apiade de nosotros. -Me vaya cappará por ti. -Dutor: médico. -Tienen casi todos los tetuaníes un defecto de pronunciación que consiste en lo siguiente: a mí me llamaban Ricadro, dicen esta tadre en vez de tarde; esto es que la re que preceda a una de, la colocan ellos a continuación de ésta.

Varias industrias dan fama a Tetuán entre las demás poblaciones marroquíes. En primer

Otra de las industrias importantes de Tetuán, y ésta siempre floreciente, es la de los azulejos (zul-lej), de formas variadísimas y esmalte o vidriado muy persistente que usan los moros para revestir suelos y paredes.

También es de notar la de cortinas de seda de gran peso, mérito y valor que llaman ellos Zemzem, con las que cubren el lecho matrimonial y que se transmiten de padres a hijos durante muchas generaciones. Duran siglos y cuestan de 500 a 1.000 pesetas lo dos pares.

La de curtidos y su secuela de babucheros es la industria que hace ocupar a más gente en Tetuán. La primera produce los famosos tafiletes rojos y amarillos de pieles de carneros y suelas de no muy buena calidad adobadas con cueros de buey. Es sistema de curtir en estas tenerías es de los más primitivo. La tenería en árabe se llama Dar ed-dbag y el curtidor Debbag, plural Debbáguin.

Me han referido en Tetúan que, a raíz de la guerra de España, todos los moros principales enseñaron a sus hijos el oficio de zapatero, porque vieron, cuando evacuaron a Tetuán y emigraron a otras poblaciones de Marruecos, que aquellos que tenían algún oficio encontraban pan y patria en cualquier parte, mientras que los poderosos de ayer que nada sabían hacer tenían que recurrir a la caridad pública para comer, ya que sus riquezas habían sido abandonadas en la fuga o saqueadas por los montañeses.

Pretende una poesía árabe (cuyo texto y traducción le puedo enviar si quiere) que el año de la fundación de Tetuán se halla en el valor numérico de las letras que forman la palabra Tsefaha (manzana). Usted sabe que las letras árabes tienen su valor numérico como entre los romanos lo tenían las latinas. Según pues esta poesía, Tetuán se fundó el año 494 de la Hegira, que corresponde a 1100-1101 de nuestra cuenta. Se concluyó de edificar (siempre según dicha poesía) en 20 años y trabajaron en su construcción 240 hombres y 2 mujeres. -Según otros el fundador de Tetuán o por lo menos el que convirtió el antiguo fuerte en una población fue Sidi Ali El Mendry, moro granadino cuya tumba se encuentra en Bab El Mecabar.213 El patrono de Tetuán es Sidi Seidi. Una de las Mezquitas más veneradas es la edificada para panteón y en honor de Sidi Ali Ben Raisun, tío del famoso Raisuli de quien tanto se ha hablado en estos últimos tiempos.214

Interrumpo aquí esta ya larga carta porque esperamos para hoy -3 de Marzo- la tercera escuadra del Pacífico.

Me permití dar una carta de presentación para V. a mi amigo Sr. Kolemine, hijastro de mi jefe el Ministro de Rusia, que es un gran admirador de V. En la seguridad de que V. lo atenderá le anticipo un millón de gracias.

La madre de este Señor que ha leído todas sus obras -traducidas, por no saber el español- tiene un grandísimo deseo de poseer un autógrafo de Usted, y yo quisiera complacerla. Así pues   —113→   me permito rogarle muy encarecidamente que me mande V. lo que V. crea oportuno, y si no se le ocurre otra cosa una tarjeta postal con algún pensamiento suyo. Se llama esta señora Madame A. de Bachéracht

y yo le vuelvo a suplicar a V. que la complazca, con lo cual me hará V. un señaladísimo favor.215

Deseo que no tema V. molestarme en lo más mínimo siempre que a V. se le ocurra algo. Si desea que amplíe alguno de los datos que van en la presente, indíquemelo; si necesita V. algunos nuevos, mande. Siempre estoy a sus órdenes y en servirle tiene un gran placer y honor su más atto. amigo y s. s.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)

Dispénseme el papel que no puede ser más indecente. No tengo otro modo a mano y otra vez será mejor.




16

Tánger, 28 de Abril de 1905.

(Aquí de otra mano, probablemente de Galdós:) Madme A. de Bacheracht.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Mi muy respetable Señor y amigo: Hace algún tiempo contesté a V. algunas preguntas sobre este país, enviándole algunos datos que me prometía ampliarle a medida que V. lo fuera solicitando. O aquéllos han sido suficientes o V. me ha escrito pidiendo más y yo no he recibido su carta; lo que sentiría muchísimo porque habrá V. pensado que soy un perezoso, cuando para el servicio de V. me transformo en el hombre más activo del mundo.

La señora de mi amistad de quien hablaba a V. en mi última, que tenía grandes deseos de poseer en su valiosísima colección de autógrafos uno de V., a quien admiraba, se ha marchado, no sin antes rogarme que solicite de nuevo de su esquisita amabilidad este singular favor. Ya sé yo que esto le carga y le molesta a V. mucho y hasta le roba un tiempo precioso, pero qué quiere V., el llegar a la celebridad mundial tiene también sus molestias, y ante el ruego insistente de una mujer hay que someterse.

He leído estos días que se va a publicar un periódico titulado «La República de las Letras» en el cual tiene V. algo que ver. Si a la redacción interesan las cosas de este país, escuso decirle a V. que, siendo cosa de V., me ofrezco para lo que me crean útil. Podríamos publicar algunos estudios marroquíes ya desde el punto de vista político, social, comercial o religioso.

Usted verá.

Me entregó Cólogan (hijo) la placa del grupo.216 Un millón de gracias. Espero el ejemplar de Aita Tettauen, dedicado, que V. tuvo la bondad de ofrecerme. Rinaldy, a quien una enfermedad de la vista le impide escribir, me encarga le diga a V. lo muchísimo que le agradece el retrato que de él hace.217

Reciba afectuosos recuerdos de mi mujer y V. sabe que dispone incondicionalmente de su más atto. amigo y s. s.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)



  —114→  
17

«Marruecos» Tánger, 14 de Agosto de 1908.

Revista Española y de Intereses Generales (Marruecos)
(Se publica el 1.º y el 16 de cada mes)

Director: Ricardo Ruiz.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Santander.

Muy respetable e ilustre amigo: ¿Se acuerda V. todavía de mí? Yo continúo siendo cada vez más admirador de V. y con todo el respeto que V. me merece me permito molestarle hoy para solicitar de V. un singular favor.

El día 1.º de Septiembre empezaré a publicar una revista quincenal cuyo título encabeza esta carta. ¿Querría V. honrarla enviándome para el primer número una cuartilla con recuerdos de su inolvidable viaje a Tánger?

Rogando a V. me perdone el atrevimiento y dándole un millón de gracias anticipadas, se repite de V. el más atento amigo y devoto admirador, q. l. b. l. m.

Ricardo Ruiz
(rúbrica)




18218

Tánger, 25 de Octubre de 1910.

Señor Don Benito Pérez Galdós.

Mi muy respetable amigo: A mi vuelta de una excursión por el Rif, donde he estado documentándome para un trabajo que hace ya tiempo tengo entre manos, titulado «Desde el Muluya al Sebú», dos de cuyos capítulos han sido publicados por la Real Sociedad Geográfica,219 me he encontrado la cariñosa carta del buen amigo Valeriano, a quien escribo hoy mismo, con el temor de que sea demasiado tarde para su objeto.

Ya sabrá V., porque el proyecto se halla consignado en el presupuesto del Ministerio de Estado leído últimamente en el Congreso, que aquel Departamento ha decidido crear un «Centro de Estudios Marroquíes», cuya falta se hacía sentir para acabar con tanta fantasía morisca como ha propagado la nutrida literatura hispano-marroquí. Gracias a este centro podrá al fin saberse en España la verdad sobre este país interesantísimo y tan distinto de todo lo conocido. Pero esto a condición de que los que lo formen no sean otros tantos cultivadores de la farsa corriente.

Ya sabe V. lo que yo, por haber nacido aquí, por conocer el árabe como mi propia lengua y por mis aficiones al estudio del Marruecos verdadero, conozco de este país.

Ello me ha inducido, sin huera vanidad, a creer que estoy en condiciones, que ningún otro español puede reunir, para dirigir ese centro, y para conseguir este propósito es para lo que hoy me decido a molestarle, rogándole me perdone la molestia que le ocasiono.

Usted puede hacer mucho por mí en esta ocasión, mi venerado y admirado amigo, bien recomendándome, con la eficacia que V. puede hacerlo, a sus amigos que directa o indirectamente hayan de influir en la designación, o bien publicando, en recuerdo de «Aita Tettauen», algún suelto en un periódico de su predilección, hablando de mi modesta persona y de mis conocimientos positivos de Marruecos y sus habitantes.

  —115→  

Vuelvo a suplicarle me dispense la molesta pretensión con que he interrumpido un tan largo silencio, pero el convencimiento de su mucha indulgencia y de que su intervención puede ser decisiva para la realización de mi ideal me han decidido a ello.

Algo ha variado este país desde su viaje de V. a Tánger. Aunque lentamente, la tan traída y llevada conferencia de Algeciras va dando sus frutos, sobre todo en la periferia. El interior ve aún con indiferencia no exenta de algún recelo el movimiento evolutivo. Por ahora la tranquilidad es completa. Puede viajarse por estos malos caminos de herradura con menos comodidad, seguramente, pero con harto más seguridad que por las asfaltadas avenidas de la gran urbe parisiense. El peligro apache es mucho más grande que el ofrecido por estos desgraciados e ignorantes marroquíes. Por la parte de Melilla el país está sometido, pero no tan dominado y sojuzgado como había derecho a exigir teniendo en cuenta que para ese resultado fueron empleados unos sesenta mil hombres.220 Ello es la consecuencia lógica de la falta de preparación, del desconocimiento inconcebible que en España se tiene de Marruecos. Con preparación y conocimiento sobraban las dos terceras partes de aquel extraordinario contingente de tropas para obtener un resultado mucho más positivo. Pero tal es nuestro sistema: dejarlo todo al azar y resolver después por la fuerza lo que pudo evitarse con más conocimiento y previsión.

Nada más por hoy que expresarle de nuevo mi agradecimiento por cuanto se digne hacer en favor mío y reiterarle mi admiración inquebrantable con las seguridades de mi más distinguida consideración.

L. e. l. m. su afmo. amigo

Ricardo Ruiz

Villa Calpe

Tánger





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