Parece referirse a la guerra que por su libertad
política, sostuvieron los colonos holandeses del sud-africano, contra
Inglaterra, en la segunda mitad del siglo pasado que recrudeció en
1905.
1122
Duérmete mío nenu
duérmete mío amor,
duérmete pedazo
de mi corazón.
A. de Ll. 1024.
Arrurrú, mi guagua
arrurrú, mi sol
arrurrú, pedazo
de mi corazón.
R. A. L., 51-15.
1123
Recotún, recotán,
las campanas de San Jaun
unas piden vino
y otras piden pan,
er pan está'n la cocina
¿cuántos deos tiene 'ncima?
R. M., 82.
Aserrín, aserrán
los maderos de San Juan
los del rey asierran bien
los de la reina también;
los del duque...
¡Truque, truque!
A. S., 24.
1124
Supongo que esta rima infantil es una modificación
de esta española:
Mateo, el diablo te mete el deo
el gato la
uña,
el buey la
pezuña,
el águila el pico,
y... arre, borrico.
Chincha y
casuña: no sé qué
querrán decir, son voces sin sentido, comunes en el lenguaje de los
niños.
1125
Yo tengo, tengo tengo
y tú non tienes nada.
yo tengo tres ovejas
arriba na majada
une me da leche,
otra me da lana,
otra me da queso
pa toda la semana.
A. de LI. 767.
1126
Duérmete mi niño
que tengo que hacer
lavar tus pañales
planchar y coser.
A. de LI. 1026.
1127
A imitación de un romancillo de Mambrú se
canta este, otro en que el personaje es una mujer. Véase en la forma
encontrada en España por Aurelio de Llano, n.º 1115.
1115
Elisa va en un coche;
que peinadita va
con la birulí,
con la birulá
Elisa
Elisa la de Mambrú
que hermoso pelo tiene;
¿quién se lo peinará?
Se lo peinará su tía
con peines de cristal.
Elisa ya se ha muerto
la llevan a enterrar
la caja era de oro
la tumba de cristal,
en cima de la tumba
un pajarito está,
cantando el pío pío
cantando el pío, pa.
Don Eugenio de Olavarría y Huarte publicó
esta otra variante del mismo romance, en la
Biblioteca de las tradiciones populares
españolas, tomo 2.º, pág. 71.
A Atocha va una niña; carabí
hija de un capitán -carabí,
hurí, hurá
Elisa, Elisa de Mambrú.
Qué hermoso pelo lleva; curabí;
¿Quién se lo peinará?
-carabí, hurí, hurá,
Elisa, Elisa de Mambrú.
Se lo peina su tía;
con mucha suavidad -carabí, hurí,
hurá,
Elisa, Elisa de Mambrú.
Con peinesito de oro; carabí
y horquillas de cristal -carabí, hurí,
hurá
Elisa, Elisa de Mambrú.
Elisa ya se ha muerto; carabí
la llevan a enterrar -carabí, hurí,
hurá,
Elisa, Elisa de Mambrú.
La caja era de oro; carabí
la tapa de cristal -carabí, hurí,
hurá,
Elisa, Elisa de Mambrú.
Encima de la tumba; carabí
un pajarito va -carabí, hurí,
hurá,
Elisa, Elisa de Mambrú.
Cantando el pío, pío; carabí
cantando el pío, pa -carabí,
hurí, hurá,
Elisa, Elisa de Mambrú.
El señor Rodríguez Marín publica
también otra variante en el n. 166 de sus
Cantos Populares
Españoles.
1128
Este romancillo francés tan popular en España
como en hispanoamérica parece referirse al duque de Marlborough (Juan
Churchill, nacido en Ach, (Devonsire) Inglaterra, el 24 de junio de 1650 y
muerto el 16 de junio de 1722).
Nada hay de cierto sobre el hecho de que este personaje sea
el Mambrú del romancillo, puesto que el Duque de Marlborough, vencedor
en la batalla de Hochstaedt; (13 de agosto de 1704) y Malplaquet, en 1709, no
murió en la guerra y su esposa Sarah Jennings, no tiene nada que ver con
Elisa, del romancillo.
Pierre Vrignault, al comentar esta canción en su
Anthologie de la Chanson
Française, pág. 162. Tampoco encuentra relación
alguna entre el personaje histórico y el de la canción que a
fines del siglo XVIII ya era conocida.
No es este el único caso de leyenda formada por la
fantasía popular alrededor de un personaje histórico y
habrá que creer que esto es el origen de la canción francesa de
la cual han derivado las versiones que conocemos. Véase el romance
publicado por Pierre Vrignault: