Es este tema
variante del que lleva el número 818. (N. del E.)
42
[«En tu
cara», corregido de la fe de erratas del original
(N. del
E.)]
43
Aunque de lejano
parecido formal, he aquí una seguidilla española que
nos recuerda el tema recogido aquí:
Cuando vide tus ojos
dije a los míos:
-Ya tenemos enfrente
los enemigos.
Respondió el alma:
-Ya están haciendo
fuego
las avanzadas.
(Ex Rodríguez Marín, Cantos
populares españoles, op.
cit., n.º 1205).
(N. del E.)
44
Véase unas
variantes, con otro sentido, bajo los números 2195 y
siguientes. (N.
del E.)
1926. La copla
española más; semejante a la nuestra dice:
Al infierno me fuera
de buena gana,
si la luz de tus ojos
fueran las llamas.
(Ex Rodríguez Marín, Cantos
populares españoles, op.
cit., n.º 1205).
(N. del E.)
45
[«Es una
estrella», corregido de la fe de erratas del original
(N. del
E.)]
46
Entre los pocos
cantares del pueblo cuya cronología puede insinuarse con
cierta aproximación, se encuentra esta seguidilla citada por
Fouché Delbosc en su trabajo Séguedilles anciennes, publicado en la
Revue
hispanique, año 80, páginas 309 y siguientes,
París, 1901. He aquí los textos de Foulché con
algunos correspondientes nuestros: «Les
deux cent cinquante premières séguedilles que nous
publions -dice, el coleccionista- nous paraissent dater de la fin du
seixième ou des premières années du
dix-septième siècle. Tous les manuscrits qui les
contiennent sont de la première moitié du
dix-septième, et se trouvent a la Biblioteca Nacional
de Madrid (310)». Los números negros indican las
coplas de la Revue, los otros las de nuestro
Cancionero.
78
Veinte y dos años
tengo;
madre, casarme
que me duelen los dedos
de tanto urgarme.
1945
Veinte y cinco años
tengo
quiero casarme,
ya se me pasa el tiempo
de aprovecharme.
141
Si tuviera figura
mi pensamiento
¡qué de veces lo
hallaras
en tu aposento!
137
Si formas tuvieran
mis pensamientos,
los tendrías siempre
en tu aposento!
142
Parecen mis penas
olas de la mar
porque bienen unas
quando otras se ban.
438
Mis dichas y mis desdichas
son cual las olas del mar:
mis desdichas las que se
vienen,
mis dichas las que se van.
166
Zinco efes tienes
sin ser Françisca:
fea, floja, flaca,
fázil y fría.
688
Cinco nombres con
«efe»
tiene mi dama:
es fría, flaca y fea,
frágil y falsa.
232
Vete poco a poco
morena mía,
que las cosas de gusto
no quieren prisa.
2060
Vamos poco a poco
no te apresures,
que este amorcito tierno
quiero que dure.
297
La piedra que mucho roda
no es buena para
çimiento46.1;
la mujer que a muchos ama
tarde cobra casamiento.
1414
La piedra que rueda lejo
no sirve para
cimiento46.1;
la mujer que es querendona
no le traten casamiento.
(N. del E.)
46.1
[«Cimiento», corregido de la fe de erratas del original
(N. del
E.)]
46.1
[«Çimiento», corregido de la fe de erratas del
original (N. del
E.)]
47
En Oaxaca
(Méjico) se recoge esta versión:
Aquí está la piedra
lisa
en donde yo me resbalé
aquí no hay quien me
levante
ni quien la mano me dé.
Dada con sus
melodías de canto por Eleanor Hague en su Spanish American Folksongs,
op. cit.,
página 90, número, 65, en una composición
intitulada: Las mañanitas. (N. del E.)
48
He aquí la
copla española más parecida a la nuestra:
Estudiante quise ser
y así que vi tu
hermosura
a los infiernos tiré
tintero, papel y pluma.
Lo trae
Rodríguez Marín en su Cancionero citado, con
el número 1755. (N. del E.)
49
Dice otro cantar
español:
Para verte y no hablarte
más bien quisiera
no haberte conocido
por vez primera.
(N. del E.)
50
«Acullicar» es el acto de triturar con los dientes el
«acullico», hecho con hojas de coca. Costumbre muy
vulgarizada en el oeste andino y en el norte de nuestro
país, ella rinde a los paisanos su común
apatía y su gran resistencia para soportar muchas horas sin
alimentarse y además se vincula a su ideario religioso.
Así cuando pasan -camino de sus sierras- junto a
algún símbolo de culto indígena, depositan
allí el acullico. (N. del E.)