Defendido por todos

José Luis Alonso de Santos

Es inevitable, al hablar de Antonio Buero Vallejo, decir cosas en las que coincide la mayoría. Él era un autor poco polémico en el mundo del teatro: el reconocimiento a los valores de su obra era general. Y no fue fácil. Buero renovó las ideas y los valores del teatro español de nuestro tiempo. Fue un autor de síntesis, porque fue un gran defensor de la libertad. Ahí están sus piezas históricas: Un soñador para un pueblo, La detonación, El sueño de la razón o Las Meninas; ahí están Historia de una escalera, En la ardiente oscuridad, El concierto de San Ovidio, Lázaro en el laberinto y tantas otras para demostrarlo.

Tanto fue así, que siendo un hombre de izquierda, a él lo defendía ABC (en el Jurado que le concedió el premio Lope de Vega, allá en 1949, se encontraban Juan Ignacio y Cayetano Luca de Tena). Y es que él encarnó un importante cambio en aquella España: Buero ya no era un hombre a fusilar, sino a ser defendido por todos.

Hablando de valores teatrales, él ha sido el gran hombre de nuestro teatro y le tocó ser cabecera de generación. Cuando estrenábamos los más jóvenes, sus hermanos mejores o sus hijos teatrales, él iba a la función, y esa aprobación suya de nuestro trabajo nos ayudaba mucho. Fue un gran hombre y es uno de los grandes autores del teatro español de todos los tiempos, junto a Calderón, a García Lorca, a...