Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.

Manuel FERIA, En ascuas

Autoedición, Santa Cruz de Tenerife, 2017, 71 págs.

Para salvaguardar el delicado equilibrio cósmico, las sombras se desplazan a la velocidad de la luz.


Vivo en ascuas por saber si soy prueba o error.


Si no habla el alma de nada se habla, y si no se habla de nada para qué se habla.


La pasión es esa molesta emoción que nos impide disfrutar del amor.


La alegría acerca, el sufrimiento une.


El ser querido es una de las formas de Dios.


Los demás son nuestra verdadera medida del tiempo.


Que ninguna religión te robe el cuerpo ni ninguno ideología tu cerebro.


¿Qué aprenderá la inteligencia artificial cuando pronuncio la palabra amor?


En un velatorio todos parecemos acreedores.


Dijo el Señor: ¡creced y multiplicaos! Y crecimos y multiplicamos... el caos.


Al principio de nuestra vida, el final está muy lejano; al final, el principio está muy cercano.


Algunos nos ponen el listón tan bajo que, en lugar de saltarlo, nos obligan a tropezarnos.


El 95% de tu belleza es materia oscura.


Aprende a pensar, que todo lo que te enseñan ya se sabía.


Para no estar de acuerdo con nadie, cambiaba continuamente de opinión.


El azar es la disculpa del destino para no asumir sus responsabilidades.


Nadie está solo si está en paz.


La fe es la inteligencia del corazón.


El registro fósil está lleno de reyes de la creación.


Cuando las inteligencias no se afanan las creencias se arrellanan.


El uso de la razón se alcanza y se pierde con la edad.


El futuro es un conjunto de pasados por usar.


La igualdad de los sexos no debe ser tan importante cuando la evolución no le ha prestado la menor atención.


Todo se descompone, pero solo la luz lo hace de la forma más sublime.


Nos define mejor lo que nos sobra que lo que nos falta.


El alma no existe, pero se hereda.


Soy en la medida en que puedo no ser.


El efecto no suele tener buena opinión sobre la causa.


La realidad es el sueño de las cosas.


Los olvidos se alimentan de recuerdos.


En ciencia solemos prestar más atención a pequeñas coincidencias que a grandes discrepancias.


La inmortalidad es la muerte sin límites.


Por ahora, la eternidad es pasado.


La certeza es solo la duda más improbable.


Al final, la vida es lo que queda de un deseo dentro de un sueño.