691
El sentido de esta parábola se halla suficientemente explicado por la doctrina relativa al libre alvedrío humano, que hemos tenido tantas veces ocasión de consignar. El jansenismo hallaba, según Lutero, en esta expresión, la justificación de la teoría del siervo alvedrío, de la condenación fatal, y de la predestinación absoluta de ciertas almas al infierno.
692
Isa. VI, 9-10.
693
Matth., XIII, 1-16; Marc., VI, 1-13; Luc., VIII, 4-8.
694
Mateo, XIII, 18-23; Marc., 13-15; Lucas, VIII, 9-15.
695
Math., XIII, 24-30.
696
Marcos, IV, 26-29.
697
Matth., XIII, 31-31; Marc., IV, 30-32.
698
Matth., XIII, 33, 44, 52.
699
Marcos, IV, 33-34.
700
Matth., XIII, 36-43.