791
«Hallé
entre los papeles de la secretaría de Estado la negociación
de amistad propuesta por el emisario Golmitz.»
Memorial de
Floridablanca. COXE, España, etc., cap. 71 , cita el
tratado de Hyder Alí como prueba de que la España
no había mediado de buena fe entre la Francia y la
Inglaterra, al par que no pasa por alto que esta negociación
había comenzado en el ministerio de Grimaldi. El continuar
y concluir una negociación pendiente como esta no
puede argüir deseos de provocar las hostilidades. Para
estar en paz con Inglaterra, no se había de obligar
España a no ser amiga de ninguno de sus contrarios.
792
Las Gacetas de Madrid, desde el principio al fin de la guerra, abundan en ofrecimientos y en donativos de esta clase.
793
Esta suposición gratuita forma el tema de WILLIAM COXE al tratar de este asunto. En el capítulo 70 de la obra tantas veces citada asegura que el ministro español continuó sus preparativos de guerra, meditando ya unirse con la Francia a fin de repartirse los despojos de una nación, de la cual se imaginaba que iba precipitadamente a su decadencia: añade que la manera de declarar el rompimiento nada tuvo de franco ni de valeroso, sino que fue esencialmente contrario al carácter de la nación española y poco honorífico para un soberano que se glorificaba de mantener las reglas de la buena fe y de proceder con justicia. Los textos que se citan en este capítulo dan legítimamente por infundadas las declamaciones de este historiador, que no supo en este punto desprenderse de las preocupaciones nacionales.
794
LÓPEZ de AYALA (D. Ignacio), Historia de Gibraltar, Madrid, 1782.-MURIEL, Gobierno de Carlos III, Introducción.
795
Correo de Europa, número correspondiente al viernes 27 de agosto de 1779. ARMONA (D. José Antonio), en nota a la traducción del artículo en que se retrata con bastante exactitud a Carlos III, opina ser obra de lord Grantham o de Mr. Robinson, su hermano y secretario de embajada. Esta traducción se halla al frente de un abultado volumen en folio, titulado Papeles de la presente guerra. Perteneció a dicho Sr. Armona; y habiéndolo adquirido el Sr. Gayangos, debo a su fina amistad que hoy sea mío.
796
Aranda a Floridablanca: 3 de abril de 1779.
797
Palabras textuales del Memorial de Floridablanca a Carlos III. WILLIAM COXE asiente también a este dato, cap. 71.
798
Así
lo dice FERNÁN NÚÑEZ, Compendio, etc.,
parte II, cap. 3.º. Floridablanca escribía a Aranda
el 25 de octubre: «Ese Ministerio quiere dinero, y algo le
daríamos, a pesar de nuestros enormes gastos, si las
cosas hubieran ido mejor; pero el Rey sentiría pagar
el precio de la engañifa o de la indolencia... Sin
embargo, V. E. no los desanime; y con tal que tengan constancia
y buena fe, nos esforzaremos cuanto podamos, etc.»
Para referir
los movimientos de las escuadras he tenido a la vista los
documentos siguientes: «Extracto de las ocurrencias diarias
en la escuadra del Excmo. Sr. D. Luis de Córdoba en
la campaña del año 1779 contra Inglaterra».-
«Extracto de la navegación que ha hecho la fragata
Santa Gertrudis, de una de las escuadras del mando del excelentísimo
señor D. Luis de Córdoba, desde el puerto de
Cádiz hasta el de Brest, según el diario del
teniente de navío D. Ignacio de Álava».-
«Derrota
de la escuadra y acaecimientos generales».-
«Relación
de la campaña de mar del año de l779, escrita
por M. Bosch, oficial del regimiento de Languedoc, embarcado
en el navío del Rey Cristianísimo el Indiano».-
-Tres mapas: en el 1.º están marcadas las operaciones
de la escuadra combinada de España y Francia en la
campaña de 1779 contra Inglaterra: en el 2.º la posición
en que estaban las escuadras española, francesa e
inglesa cuando se avistaron el 31 de agosto al amanecer:
en el 3.º la posición en que se hallaban a las doce
del mismo día.
799
La
relación de la campaña hecha por M. de Bosch
termina de este modo: «Y parece que el desembarco proyectado
en Inglaterra absolutamente ha de tener ejecución.»
Es de notar que hablaba de esta suerte desde Brest el 18
de setiembre de 1779. Con efecto, el plan del Gobierno francés
era hacer en el otoño una campaña de cinco
semanas, ya fuera para batir la escuadra inglesa, ya para
efectuar el desembarco. Asintiendo a ello el Gobierno español,
dispuso que se retiraran los navíos de Córdoba,
si no se había realizado uno ni otro a la mitad de
octubre. El 11 de este mes decía Floridablanca a Aranda:
«El diablo me tienta persuadiéndome a que esa corte
no quiere hacer la expedición de Inglaterra.»
800
El conde de Aranda pasó
a Brest en la última mitad de octubre para acelerar
la partida de D. Luis de Córdoba con rumbo a Cádiz,
y demostró ser imposible que la escuadra francesa
estuviera pronto en disposición de operar el desembarco.
En 29 de octubre escribía desde aquel punto animando
a procurar la rendición de Gibraltar durante el invierno:
a este fin proponía que se dieran a las tropas de
tierra dobles tiendas con mucha paja para camas y mantas
con que cubrirse, sin pensar en cuarteles: por la mar era
de parecer que se juntara mucho buque menor, aun cuando se
perdiera alguno, pues una tempestad furiosa impedía
navegar a todos, y con volver a los cruceros, luego que empezara
a ceder, se lograría el fruto de impedir que entraran
víveres en la plaza, la cual, estrechada por hambre,
no tendría más recurso que el de abrir sus
puertas. Entendía que Barceló era el mejor
de todos para tales operaciones, y que con los navíos
se debía maniobrar según las reglas que pareciesen
más oportunas. Ya con el mismo pensamiento de apurar
a Gibraltar le había dicho Floridablanca el 27 de
setiembre: «En Cádiz necesitamos una fuerte escuadra
para todo lo que pueda convenir, y sin Córdoba no
la podemos completar.»
Aranda escribía textualmente
lo de la aparente fraternidad el 2 de enero de 1780, manifestándose
cansado de lidiar con un Ministerio «a quien los discursos
más razonables no hacían la menor impresión
en siendo diversos de su carácter ligero y de los
fines particulares que llevan a su solo negocio.»