«Ilmo. Sr.: La obra titulada El descubrimiento del Estrecho de Magallanes que V. I. ha remitido al señor Director de esta Real Academia a fin de que la Corporación emita informe a los efectos del art. I.º del Real decreto de I.º de junio de 1900, fué publicada por la Biblioteca de Historia Hispanoamericana con el propósito de que figurase en el certamen de los actos conmemorativos del descubrimiento del mencionado Estrecho. Encomendó el trabajo al reverendo padre Pablo Pastells, doctísimo investigador de nuestro Archivo de Indias; el sabio   —6→   jesuita respondió como era de esperar al encargo de los Directores de la Biblioteca mencionada y ha producido el estudio documentado más completo que existe acerca de los viajes y descubrimientos de Magallanes y sus compañeros en la famosa expedición de 1519-1522, estudio avalorado con la reseña y correspondientes documentos de expediciones españolas posteriores hechas al mismo Estrecho de Magallanes y al Grande Océano.

Empieza la obra del padre Pastells con breves preliminares, que tratan del descubrimiento de América y del mar del Sur y de las tentativas para buscar la comunicación entre el Atlántico y dicho mar. Entrase luego en la relación detallada de la expedición de Magallanes, con datos biográficos del gran navegante, resumen de sus viajes anteriores a las Indias orientales o portuguesas y antecedentes que le impulsaron a buscar aquel paso, de que tanto hablaban los pilotos y cosmó grafos de la época.

Los principales incidentes de las dificultades que hubo para armar la expedición van ilustrados con interesantes notas documentadas, y desde que la flota zarpa del puerto de Sevilla, hasta que Magallanes muere en la isla de Mactán, se van sig uiendo paso a paso los trances y aventuras de la famosa expedición. Después, cuando la Trinidad y la Victoria, las dos únicas naves que quedaron, van y vienen por los mares del Archipiélago Asiático, el padre Pastells nos describe las penalidades que sufrieron, y la suerte que cupo a los tripulantes, y la hazaña inmortal de Juan Sebastián del Cano y sus compañeros. Habla el autor; pero hablan más los documentos que aduce, entre ellos los que demuestran el derecho preferente que sobre Portugal tuvo Castilla al dominio de las islas Molucas.

Se había encontrado el paso entre ambos Océanos, se había descubierto el novísimo mundo marítimo, se había circunnavegado el planeta. Pero todo esto no era más que el principio de audaces empresas que acometieron los navegantes españoles recorriendo en todos sentidos el inmenso Océano que se extiende entre el nuevo mundo y las extremas tierras orientales del Continente antiguo. El padre Pastells nos informa de la expedición de Loaysa con Sebastián del Cano y del viaje de aquella nave   —7→   mandada por Francisco de Hoces que dobló en enero a 1526 la parte más meridional de tierra americana, ese cabo que muchos años después vieron y bautizaron los holandeses, y que por lo menos para los españoles debiera ser el cabo de Hoces y no el cabo de Hornos.

Siguen las reseñas de las expediciones de Saavedra, Alcazaba, Camarco y Ladrillero, con las descripciones que éste hizo del Estrecho y de las tierras meridionales de América, y da fin el tomo I de la obra con 47 documentos del Archivo de Indias y la lista de títulos de otros 375 referentes a las expediciones antes citadas.

El tomo II está dedicado a la célebre expedición de Pedro Sarmiento de Gamboa y a las poblaciones del Estrecho de Magallanes por él fundadas y vicisitudes sufridas con motivo de estas fundaciones. La mayor parte del volumen son documentos de excepcional interés: cartas escritas y derroteros formados por Sarmiento de Gamboa; relaciones extensas, detalladísimas, de todo lo que le sucedió en sus viajes y de su apresamiento por los ingleses, noticias de los corsarios de América, etc., etc.

El padre Pastells, "que ha consumido los mejores años de su vida rebuscando noticias en los legajos de nuestro riquísimo Archivo de Indias", ha hecho un verdadero y afortunado alarde de erudición y trabajo documental, y el libro que ha compuesto y que está sometido al informe de esta Real Academia, El descubrimiento del Estrecho de Magallanes, merece el dictamen favorable a que se refiere el Real decreto de 23 de junio de 1899 en relación con el art. I.º del Real decreto de I.º de junio de 1900, es decir, la expresa declaración del mérito relevante de la obra.»