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11

La de la abstracción, incluso en su grado sumo, no era una categoría ajena a los personajes de los diálogos renacentistas, como la paradigmática obra de León Hebreo, sostenida por Filón y Sofía, puede atestiguar. A ello cabría sumar, en lengua castellana, los Diálogos de Diego de Aguayo, los Diálogos de Phantástica Philosophía de Miranda Villafañe, el Arte de bien confesar de Juan de Villagraña y otros que recoge Jesús Gómez, ob. cit., pp. 27-28.

 

12

Cfr. F. Rico, El pequeño mundo del hombre. Varia fortuna de una idea en las letras españolas, Madrid, Alianza, 1986. Analizo los demás motivos que el tema de la dignitas hominis despliega en la obra del humanista cordobés en Fernán Pérez de Oliva y la crisis del Renacimiento, Universidad de Córdoba, 1987, donde también se encuentra el origen de estas páginas.

 

13

Sigo la versión rítmica de A. García Calvo, Virgilio, Madrid, Júcar, 1976, p. 133.

 

14

La obra de Oliva parece mostrarse especialmente propicia a este tipo de continuaciones, que se repitió en el caso de su tragedia Hécuba triste, cuyo primer editor, en este caso Morales en el volumen de 1586, también añadió un largo parlamento final, redactado por su hermano Jerónimo de Morales, en el que Agamenón pronuncia la sentencia que el autor omitió tras el alegato de Hécuba. Otra obra, el Dialogus inter Siliceum, Arithmeticam et Famam, presenta las mismas características de final abierto. Su edición en vida del autor impidió, sin embargo, que se le añadieran continuaciones, a no ser la epístola que Ambrosio de Morales se vio empujado a colocar junto a ella al realizar su edición. Cfr. P. Ruiz Pérez, «Composiciones hispano-latinas del siglo XVI: los textos de Fernán Pérez de Oliva y Ambrosio de Morales», Criticón, 52 (1991), pp. 111-139.

 

15

Max Aub, Manual de historia de la literatura española, Madrid, Akal, 1974, p. 192.

 

16

Aurora Egido, «Sin poética hay poetas. Sobre la teoría de la égloga en el Siglo de Oro», Criticón, 30 (1985), pp. 43-77.

 

17

Aubrey F. G. Bell, El Renacimiento español, Zaragoza, Ebro, 1944, pp. 196-197.

 

18

Para la relación entre los personajes y el marco natural, cfr. F. López Estrada, Los libros de pastores en la literatura española. La órbita previa, Madrid, Gredos, 1974, pp. 80-81.

 

19

Trazo el horizonte de este propósito en «Sobre el debate de la lengua vulgar en el Renacimiento», Criticón, 38 (1987), 15-44; y lo analizo en el conjunto de la obra del humanista en Fernán Pérez de Oliva y la crisis del Renacimiento, ed. cit.

 

20

Cfr. mi estudio «La cuestión de la lengua castellana: aspectos literarios y estéticos en los siglos XV y XVI», en Gramática y Humanismo. Perspectivas del Renacimiento español, ed. P. Ruiz Pérez, Madrid, Libertarias, 1993, pp. 119-143.