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Cf. de Concha Fagoaga: La voz y el voto de las mujeres. El sufragismo en España (1877-1931) (Barcelona, Icaria, 1985); Esperanza García Méndez: La actuación de la mujer en las Cortes de la II República (Madrid, Ministerio de Cultura, 1979); Rosa M.ª Capel Martínez: El sufragio femenino en la Segunda República española (Madrid, Horas y Horas, 1992); Shirley Mangini: «Mujeres visibles en la Segunda República española», en su obra, Recuerdos de la resistencia: la voz de las mujeres de la guerra civil española (Barcelona, Península, 1997, págs. 32-48) y «El voto por el sufragio femenino», en su obra: Las modernas de Madrid. Las grandes intelectuales españolas de la vanguardia (Barcelona, Península, 2001, págs. 216-233); María del Carmen Domingo Soriano: Con voz y voto. Las mujeres y la política en España (1931-1945) (Barcelona, Lumen, 2004), etc.

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Cf. el amplio estudio que dedica a sus memorias Lydia Masanet: en La autobiografía femenina española actual (Madrid, Fundamentos, 1998, págs. 67-102): así como de Bettina Pachecho: «María Campo Alange: la memoria de la infancia», en su obra, Mujer y autobiografía en la España contemporánea (San Cristóbal, Venezuela, Universidad de los Andes/Lito Formas, 2001, págs. 231-244), etc.

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Además de Constancia de la Mora Maura (Madrid, 1906-Guatemala, 1950) -casada, primeramente, con el acaudalado malagueño Manuel Bolín, del que se divorciaría poco después, con el que vivió en Málaga y tuvo una hija- que plasmó sus vivencias en Doble esplendor. Autobiografía de una aristócrata española, republicana y comunista (México, Atlante, 1944; La Habana, Venceremos, 1966; con otras ediciones en Barcelona, Crítica, 1977; Madrid, Gadir Editorial, 2004 y 2006 y Barcelona, Círculo de Lectores, 2006; con prólogo, las dos últimas, de su primo Jorge Semprún -otro exiliado también memorialista-, y Barcelona, Círculo de Lectores, 2006). La obra ha sido traducida a varias lenguas.

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Cf. lo que dice de ella Carmen de Zulueta en Compañeros de paseo (Sevilla, Renacimiento, 2001); además de María Telo Núñez: Concepción Arenal y Victoria Kent: las prisiones, su vida, su obra (Madrid, Reprografía Diazoplan, 1933 y Madrid, Instituto de la Mujer, 1995); María Dolores Ramos (ed.): Homenajea Victoria Kent (Málaga, Universidad, 1989) y Victoria Kent (1892-1987) (Madrid, Ediciones del Orto, 1999); Antonina Rodrigo: «Victoria Kent», en su obra: Mujeres para la historia: la España silenciada del siglo XX (Madrid, Compañía Literaria, 1996, págs. 215-239); Zenaida Gutiérrez-Vega: Victoria Kent, una vida al servicio del humanismo liberal (Málaga, Universidad, 2001); Shirley Mangini: «Tree Voices of Exile», Monographic Review/Revista Monográfica 2 (1986), págs. 208-215 y Las modernas de Madrid. Las grandes intelectuales españolas de la vanguardia (Barcelona, Península, 2001, págs. 201-213); Cristóbal Cuevas García (ed.): Diccionario de escritores de Málaga y su provincia (Madrid, Castalia, 2022, págs. 447-449); Miguel Á. Villena García: Victoria Klent: una pasión republicana (Barcelona, Delate, 2007; con prólogo de Carmen Alborg), etc. Vid. la recreación teatral de Jerónimo López Mozo: Las raíces cortadas (Victoria Kent y Clara Campoamor: cinco encuentros apócrifos) (Madrid, ADE/Consejería de Cultura y Deportes, 2005).

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Cf. las interesantes opiniones de destacados intelectuales (Ortega, Besteiro, Margarita Nelken, etc.), entre las que figuran las de la Kent, recogidas por Federico Urrutia, en España ante la restauración o el comunismo (Madrid, Minuesa, s. a.). La autora realizó, asimismo, el prólogo y una selección del pensador, exiliado, Salvador de Madariaga (1886-1978): Mi respuesta: artículos publicados en la revista «Ibérica» (1954-1974) (Madrid, Espasa-Calpe, 1982).

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Cf. los números monográficos, en los que aparece un trabajo de la autora: «Victoria Kent: una experiencia penitenciaria», en Una experiencia penitenciaria. Tiempo de Historia 17 (1976), págs. 4-10 y Las reformas del sistema penitenciario durante la II República, Historia 16, número extra VII (1978), págs. 101-112.

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Otras parlamentarias, con obra autobiográfica, como Margarita Nelken Mansberger (Madrid, 1894-México, 1968) o Matilde de la Torre Gutiérrez (Cabezón de la Sal, Cantabria, 1884-Cuernavaca, México, 1946) se sumaron también a la defensa del feminismo.

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Que se editó gracias a la intervención de Victoria Ocampo, la directora de la editorial, que tanto ayudó a los exiliados españoles. Obra publicada en francés: Quatre ans à Paris (París, Société d'Impressions du Lancry/Le Libre de Jour, 1947, con traducción de Pierre Darmangeant). Cf. de Zenaida Gutiérrez Vega: «Victoria Kent: Cuatro años en París (1940-1944)», en Manuel Aznar Soler (ed.): El exilio literario español de 1939 (Barcelona, Associació Cop d'Idees-GEXEL, 1998); Ofelia Ferrán: «Cuatro años en París, de Victoria Kent: la 'doble voz' en la escritura femenina del exilio», en Alicia Alted y Manuel Aznar (eds.): Literatura y cultura del exilio español de 1939 en Francia (Salamanca, AEMIC-GEXEL, 1998, págs. 485-496), etc.

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Como, por ejemplo, con Zenobia Camprubí (2006a), quien en la entrega tercera de su diario, constata: «Victoria [Kent] me pareció tan cerrada y estúpida como cuando estorbaba, a cada paso, las Juntas del Lyceum. En donde no hay sustancia gris, ¿qué va a desarrollarse?» (pág. 266); «porque el nombre de Victoria me extenúa» (pág. 268), etc.

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Cf. los estudios, entre otros, de Patricia W. O'Connor: Gregorio and María Martínez Sierra (Boston, Twayne, 1977) y Gregorio y María Martínez Sierra. Crónica de una colaboración (Madrid, J. García Verdugo, 1987; ton traducción de Joan García Puente); Antonina Rodrigo: María Lejárraga, una mujer en la sombra (Barcelona, Círculo de Lectores, 1992, con prólogo de José Prat; Madrid, Ediciones Vosa, 1994 y Madrid, Algaba, 2005 -las dos últimas con introducción de José Prat y prólogo de Arturo del Hoyo-). Cf. de Miguel García-Posada: «La escritora que nunca existió», El País, 17 de abril (1993), pág. 14; Rosa Herreros y Juan Aguilera Sastre (eds.): Homenaje del Ateneo Riojano a María de la O Lejárraga (Logroño, Ateneo Riojano, 1995); Alda Blanco: María Martínez Sierra (1874-1974) (Madrid, Ediciones del Orto, 1999); Andrés Trapiello: Los nietos del Cid: la nueva Edad de Oro de la literatura española (1898-1914) (Barcelona, Planeta, 1998, págs. 264-290); Shirley Mangini: Las modernas de Madrid. Las grandes intelectuales españolas de la vanguardia (Barcelona, Península, 2001, págs. 219-228), etc. Cf. el retrato que hace de ella Rosa Montero, en Historia de mujeres (Madrid, Alfaguara, 1995). En los estudios sobre Gregorio Martínez Sierra -que no consigno- hay abundantes referencias a nuestra autora.

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