Una risa amarga
Mihai Eminescu
Traducción de Ricardo Alcantarilla
Una risa amarga seca, lentamente, frunce sus labios rodeados de una espuma morada, después un grito desesperado, brillante, oscurece el aire de la habitación. Por las llamas estremecidas de la residencia marmórea amoratada en rasgos aéreos la cara triste de Toma Nour.