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641

F. Ruiz Ramón: op. cit., 559.

 

642

En carta a Christel Haack del 17 de marzo de 1976 escribe Martínez Ballesteros: «Por algo mi teatro es la clase de teatro que no quieren determinados críticos, con unos esquemas hechos de antemano [...] Yo sé que mi teatro interesa al público y que éste no se aburre. Hay muchos que creen que una manera de pasar por inteligentes es rechazar lo que llega fácilmente a la gente. Allá ellos. Hay un teatro facilón para halagar los instintos más bajos del público, y estamos todos de acuerdo en rechazarlo. Hay otro teatro, aparentemente fácil porque llega con facilidad al espectador, pero que no es nada fácil de hacer, con una dignidad crítica y una serie de inquietudes, que creo que es el que yo cultivo. No es fácil establecer esa comunicación, y eso fastidia al que no sabe hacerlo. En resumen, hay cosas aparentemente fáciles, pero que no lo son tanto». (Sobre Haack véase la nota 634 [«14» en el original (N. del E.)]; las cartas de A. Martínez Ballesteros las guardo en el Archivo del Nuevo Teatro Español que tenemos en la Facultad de Lingüística Aplicada de la Universidad de Maguncia, Sección Española).

 

643

La lista de las obras de Romero Esteo incluye actualmente, según datos del autor, las siguientes: Pizzicato irrisorio y gran pavana de lechuzos, 1965 (Madrid, Cátedra, 1978); Pontifical, 1966; Patética de los pellejos santos y el ánima piadosa, 1970; Paraphernalia de la olla podrida, la misericordia y la mucha consolación, 1971 (edición incompleta in Estreno I, 2, 1975, T1-T32); Pasodoble, 1971 (Primer Acto, 162, 1973, 15-49); Fiestas gordas del vino y el tocino, 1972-73 (Madrid, Ediciones Júcar, 1975); El vodevil de la pálida, pálida, pálida, pálida rosa, 1975 (Madrid, Fundamentos, 1979); El barco de papel, 1976; Horror vacui, 1974-83; Tartesos, 1976-83 (Pipirijaina, 26-27, 1983, 32-341). Para más detalle véase la documentación en Pipirijaina, 26-27 (1983), 22-23.

 

644

Puede verse la documentación bio-bibliográfica que el autor me ha proporcionado, incluida en el Apéndice de la tesina de Waltraud Ohlert, de la Facultad de Lingüística Aplicada de la Universidad de Maguncia en Germersheim: Spanisches Protesttheater bei Miguel Romero Esteo, 1977/78. Otras cuestiones de detalle y aspectos del propio teatro así como del teatro en general pueden verse en las diferentes entrevistas con Romero Esteo: «Diálogos a ritmo de pasodoble con Miguel Romero Esteo», Primer Acto, 162 (1973), 6-11; Amando Carlos Isasi Angulo, Diálogos del teatro español de la postguerra, Madrid, Ayuso, 1974, 391-413; M. A. Medina Vicario, El teatro español en el banquillo, Valencia, Fernando Torres, 1976, 31-39. Véase también Francisco Álvaro, El espectador y la crítica. (El teatro en España en 1973), Madrid, Prensa Española, 1974, 228-230; Fernando Lázaro Carreter, «Crítica de dos obras de Miguel Romero Esteo», Estreno I, 2, (1975), 13-16; Pedro Aullón de Haro, «El texto del teatro: Miguel Romero Esteo», Revista de Literatura, 83 (1980), 159-172, y Pedro Aullón de Haro, «La obra dramática de Miguel Romero Esteo», in M. Romero Esteo, «Tartessos», Pipirijaina, 26-27 (1983), 5-20.

 

645

Curt Meyer-Clason ha traducido Pontifical al alemán, en 1971, para la editorial Suhrkamp (distribuidora teatral), de Frankfurt.

 

646

El estreno, al parecer firmemente programado con motivo de la inauguración del Neues Schauspielhaus de Basilea y sobre el cual Romero Esteo gustaba de hablar en sus entrevistas, era considerado por los peritos competentes en materias de teatro únicamente como una «idea intensa», (Véase la correspondencia del Staatstheater de Württemberg con W. Ohlert en el Apéndice de la tesina de Ohlert, op. cit.). Una cosa es clara, y es que Suhrkamp considera apenas representable la redacción actual, y a lo sumo tendría en cuenta una redacción muy abreviada. En este contexto el traductor Meyer-Clason habla de un «cadáver viviente» (véase Ohlert, op. cit., Apéndice).

 

647

Véanse entre otras las críticas teatrales en la nota 644 [«24» en el original (N. del E.)], y la Breve autobiografía característica del genio peculiar del autor en el Apéndice de Ohlert, op. cit.; en el año 1970 el autor apunta entre otras cosas: «Desde la izquierda teatral [...] mi nombre comienza a ser omitido y silenciado cada vez que se hable de teatro nuevo. La izquierda me borra de su lista de jóvenes autores (en la cual había yo comenzado a figurar a partir del escándalo del texto-mito Pontifikale en 1966)». (op. cit., 3).

 

648

Compare F. Álvaro, El espectador y la crítica. El teatro en España en 1981, Valladolid, Álvaro, 1982, 37-39.

 

649

Véase A. Carlos Isasi Angulo: op. cit., 409 y ss.

 

650

«... Hay otras muchas represiones. Son las ocultas, son las ocultas. Por ejemplo, a la hora de toda labor de creación, la gran presión y represión por parte de la maquinaria de la kultur -oh la kultur- la cual está en mano de los teoretas de turno [...] La burocratización del pensamiento. Cosa grave, y suave y oculta pugna entre el poeta y el teoreta...» (M. Romero Esteo: op. cit., 13).