Visor de obras.

Volumen 15 - carta nº 871

Santander, 28 noviembre 1900

Mi muy querido amigo D. Juan: Recibí con mucho placer su carta y estoy conforme en escribir los tres artículos sobre el Teatro español de este siglo, a razón de 25 duros por artículo, que no me parece cantidad excesiva si se tiene en cuenta la dificultad de reducir a tan corto espacio, sin menos cabo de la claridad, una materia tan extensa. En el primer artículo trataré el período que empieza en Moratín y termina en Bretón. Dedicaré el segundo al drama romántico, y el tercero al Teatro posterior al romanticismo, desde Tamayo y Ayala hasta los dramaturgos actuales. Creo que esta división es la más natural y ajustada al orden lógico y cronológico de la materia.

Difícil será que pueda yo escribir los artículos en estas vacaciones, porque son muchas las tareas literarias en que estoy enfrascado, comenzando por mi discurso de la Academia de San Fernando, al cual estoy dando los últimos toques, y siguiendo con el prólogo de un nuevo tomo de comedias de Lope de Vega (el 12). Pero si no escribo aquí los artículos, los escribiré en Madrid, porque es trabajo que puede hacerse en cualquier parte, dado su carácter sintético y la imposibilidad de descender a pormenores de erudición. Y de todos modos estarán entregados antes del mes de septiembre de 1901.

¿Quién se ha encargado de la crítica de los novelistas? ¿Quién de la poesía lírica? ¿Qué sección es la que Vd. elige?

Celebraré que sea del agrado de Vd. el prólogo del tomo 11 de Lope, que comprende algunas comedias muy curiosas.

Por aquí no ocurre novedad alguna. Amós Escalante anda muy delicado de salud y apenas sale de casa. Pereda está algo mejor, pero no escribe nada. Mi hermano está acabando una comedia en verso con objeto de que se represente en el teatro Español en la primavera próxima.

Sé por los periódicos que tiene Vd. un nieto o nieta más, por lo cual le felicito cordialmente y deseo que continúe recibiendo buenas noticias de la China.

No tenía la menor noticia del proyecto de revista de Cotarelo, pero me parece muy bien la idea. También va a salir una Revista Iberoamericana en que colaboran varios obispos y clérigos doctos y también algunos famosos hombres de ciencia como Cajal y D. Federico Rubio. Si todos estos proyectos llegan a cuajar, no se empezará mal el siglo XX.

Otro día escribiré a Vd. más largamente. Téngame siempre por su mejor amigo

Valera - Menéndez Pelayo , p. 558-559.