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41

Obras, ed. cit., t. 1, pp. 70-75.

 

42

El Espectador (1917), en Obras Completas, t. 2, Madrid, Revista de Occidente, 19667, p. 180.

 

43

A. Lista, Artículos críticos y literarios, publicados en El Tiempo y otros varios periódicos, t. I, Palma, Imp. y Lib. de Esteban Trías, 1840.

 

44

A. Lista, Ensayos literarios y críticos. Con un prólogo por D. José Joaquín de Mora. Sevilla. Calvo- Rubio y Compañía, Editores, 1844, 2 vols.

 

45

«Sus lecciones en la misma Sevilla, en Bilbao, en Madrid, en Cádiz, han sido escuchadas por casi todos los que se ocupan y se han de ocupar por largo espacio de tiempo de la literatura española; sus artículos se han leído ávidamente por cuantos dan importancia a la pureza del gusto y al goce de la belleza artística e intelectual. Estos artículos, escritos al correr de la pluma, y según se presentaban las ocasiones, son los que se han seleccionado en la obra presente, y los que se ofrecen al público, formando en lo posible un cuerpo de doctrina.» (El Heraldo. Periódico político, religioso, literario e industrial, Edición de la tarde, 759, Madrid, sábado 23 de noviembre de 1844).

 

46

L. Vidart, «Un Prólogo de un libro inédito», en La Ilustración Española y Americana, año XVII, X (Madrid, 8 de marzo de 1873), pp. 150-151 y 154.

 

47

Cit. por A. Lasso de la Vega en su Historia y juicio crítico de la Escuela Poética Sevillana en los siglos XVIII y XIX. Memoria premiada por la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, Madrid, Imp. y Fund. de Manuel Tello, 1876, p. 262.

 

48

En una carta dirigida a Cañete, con fecha de julio de 1846, Juan María Capitán, amigo de Lista, alababa la poesía y los artículos sobre literatura de Cañete en los siguientes términos: «La poesía de V. es rica y sonora, y la prosa va teniendo todas las cualidades y casi el mismo sabor de la de Lista en sus artículos literarios». Y, más adelante, aludiendo a la inclusión de su nombre en el artículo que comentamos de Cañete, añade: «Por lo demás, aunque estoy bien persuadido de la sinceridad de V. al estampar mi nombre en su bellísimo artículo sobre la poesía lírica actual, no lo estoy tanto para creerme digno de semejante honra». (J. Mª de Cossío, «Correspondencias literarias del siglo XIX en la Biblioteca de Menéndez Pelayo», Boletín de la Biblioteca de Menéndez Pelayo, 10 [1930], p. 249).

 

49

«Crítica literaria. Estado actual de la poesía lírica en España. Primera parte y Segunda parte», en Revista de Europa, I, núms. 1 y 3 (Madrid, 15 de mayo y 15 de junio de 1846), pp. 39-50 y 163-178, respectivamente. Y en El Fénix, II, núms. 39 y 40 (Valencia, 28 de junio y 5 de julio de 1846), respectivamente. Las palabras citadas corresponden a la Revista de Europa, pp. 47 y 48. Dos años después, Manuel Cañete volvió a ocuparse de la poesía de Campoamor desde las páginas de El Faro (Madrid, 6 y 15 de abril de 1848). En estos dos artículos, Cañete sigue apreciando las primeras poesías de Campoamor y rechazando, una vez más, las doloras. Aunque, en esta ocasión, con criterios de moralidad afirma que estas últimas composiciones pecan de «indeferentismo fatal».

 

50

R. de Campoamor, «La originalidad y el plagio», en Revista Europea, II, núm. 95 (Madrid, 19 de Diciembre de 1875), p. 243. El autor vuelve a citar este párrafo en el «Prólogo» a los Pequeños Poemas, (Madrid, English y Gras, editores, 1879, cap. XII), en la primera edición de la Poética (Madrid, Lib. de Victoriano Suárez, 1883, cap. XII) y en la edición definitiva (Poética. Polémicas literarias, Valencia, Pascual Aguilar, 1890, cap. XIII).