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ArribaAbajo4.8. La calidad de vida y la satisfacción con la vida de los estudiantes universitarios


ArribaAbajo4.8.1. El grado de satisfacción con la vida del estudiante

Para evaluar la satisfacción con la vida en general, hemos utilizado la Escala de Satisfacción con la Vida de Diener, Emmons, Larsen y Griffin (1985), en la versión adaptada al castellano por Arce (1994), y por nosotros mismos. Como ya hemos comentado anteriormente, esta escala mide la satisfacción general con la vida a través de 5 ítems.

Un análisis descriptivo de los mismos nos permite descubrir, en primer lugar, que no existen diferencias por género en ninguna de las cinco cuestiones planteadas. Tampoco aparece una diferencia significativa en las puntuaciones medias totales de la escala entre varones (M=16,96; dt=3,80) y mujeres (M=16,42; dt=3,98) (t=1,487; p=0,138).

La puntuación media de la escala para el total de la muestra de estudiantes universitarios es de 16,63 con una desviación típica de 3,91. La consistencia interna de la escala, analizada a través de la alfa de Cronbach, es de 0,83.

Resulta interesante señalar el porcentaje de estudiantes que están de acuerdo, o muy de acuerdo, con el contenido de cada una de las cinco afirmaciones que integra la escala. En este sentido, el 69,7% de los estudiantes está satisfecho con su vida; el 56% afirma que hasta ahora ha obtenido las cosas importantes que quiere de la vida; el 55,2% dice que las condiciones de su vida son excelentes; el 41,5% señala que el tipo de vida que lleva se parece al tipo de vida que siempre soñó llevar; y, por último, otro 41% refiere que si pudiera vivir de nuevo su vida, le gustaría que todo volviese a ser igual. Parece evidente que aquellos elementos liagados más a la satisfacción de metas todavía no conseguidas sean los que registren en porcentaje menor de respuestas de satisfacción.

El grado de satisfacción con la vida no guarda relación con las variables edad y género, al menos en esta muestra representativa de estudiantes universitarios. El comportamiento relacional con otras variables de interés, y que mostramos en el anexo a este estudio, nos indica la presencia de asociaciones significativas (todas ellas superiores al uno por mil) con el índice de satisfacción con los estudios (r=0,28), con el estado de salud durante el último año (r=0,26), con las escalas de malestar físico (r=0,20) y de malestar psicológico (r=0,36) (a puntuaciones más altas en satisfacción, puntuaciones más bajas en malestar), estrés reciente (r=0,21), estrés asociado a los estudios (r=0,27), y con el estrés en otros dominios de   —110→     —111→   la vida (r=0,34) (estrés inversamente proporcional a niveles de satisfacción). La escala de satisfacción con la vida presenta asociaciones de mayor fuerza, sin embargo, con las variables de calidad de vida, bien sea con calidad de vida general (r=0,48) como con la calidad de vida reciente (según lámina del COOP) (r=0,43).

Tabla 4.8.1.1. Escala de satisfacción con la vida. Distribución de las respuestas a los ítems
Total
(N=527)
Varones
(n=226)
Mujeres
(n=292)
x2 p
El tipo de vida que llevo se parece al tipo de vida que siempre soñe llevar
Muy de acuerdo 5,9 5,3 6,5 8,320 0,081
De acuerdo 34,9 35,4 35,6
Indiferente 30,9 36,7 27,4
En desacuerdo 22,2 19,9 24,3
Muy en desacuerdo 4,6 2,7 6,2
nc 1,5
Las condiciones de mi vida son excelentes
Muy de acuerdo 7,4 8,4 6,8 4,266 0,371
De acuerdo 47,1 50,0 46,1
Indiferente 23,1 24,3 22,9
En desacuerdo 19,5 16,4 22,2
Muy en desacuerdo 1,5 0,9 2,0
nc 1,3
Estoy satisfecho con mi vida
Muy de acuerdo 10,8 12,8 9,6 6,280 0,179
De acuerdo 57,9 58,4 59,0
Indiferente 15,7 17,7 14,3
En desacuerdo 13,9 11,1 16,4
Muy en desacuerdo 0,4 ___ 0,7
nc 1,3
Hasta ahora he obtenido las cosas importantes que quiero en la vida
Muy de acuerdo 14,4 14,2 15,0 2,055 0,726
De acuerdo 40,8 40,9 42,0
Indiferente 15,0 17,8 13,3
En desacuerdo 26,0 24,9 27,3
Muy en desacuerdo 2,3 2,2 2,4
nc 1,5
Si pudiera vivir mi vida de nuevo, me gustaría que todo volviese a ser igual
Muy de acuerdo 8,9 9,7 8,5 5,627 0,229
De acuerdo 31,7 34,5 30,4
Indiferente 18,8 21,2 17,4
En desacuerdo 32,6 27,4 37,2
Muy en desacuerdo 6,6 7,1 6,5
nc 1,3

[Página 110]

A título exploratorio, y tal como hicimos con la valoración del estado de salud durante el último año, hemos realizado un análisis de regresión lineal múltiple de la variable «sumatorio de la escala satisfacción con la vida» considerando como variables predictoras de la satisfacción las mismas que para el estado de salud. Como se puede comprobar en la siguiente tabla, de las 20 variables predictoras de interés únicamente 6 de ellas presentan coeficientes de regresión estandarizados significativos.

Tabla 4.8.1.2. Análisis de regresión lineal múltiple de la variable «satisfacción con la vida»
Predictores Beta t sig.
Calidad de vida -0,294 -6,066 0,000
Satisfacción con los estudios 0,169 3,585 0,000
Malestar psicológico -0,175 -3,005 0,003
Comportamiento saludable 0,143 2,868 0,004
Láminas COOP -0,139 -2,459 0,014
Molestias somáticas 0,146 2,417 0,016
R=0,630
R2=0,397 (corregida=0,365)

Variables predictoras no significativas: edad, género, ingresos familiares, grado de suficiencia de dinero de gasto personal, disponer de habitación de sólo para uno, grado de religiosidad, tener planes profesionales concretos para el futuro, frecuencia de consumo de alcohol, frecuencia de uso de tabaco, horas de sueño, tener relaciones sexuales, estrés en los estudios, estrés en otras áreas, estado de salud, malestar físico.

Estas variables predictoras que presentan una R=0,630 explicarían prácticamente el 40% de la varianza de satisfacción. La valoración de la calidad de vida general, el grado de satisfacción con los estudios, la escala de malestar psicológico, el índice de comportamiento saludable, el índice de las láminas COOP, y la escala de malestar físico conformaría el grupo de variables más comprometidas en la explicación de la variación de respuestas en la escala de satisfacción con la vida.




ArribaAbajo4.8.2. Calidad de vida general

Hemos construido un ítem para medir la calidad de vida general percibida y los resultados de las respuestas los presentamos en la siguiente tabla.

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Tabla 4.8.2.1. Calidad de vida general percibida
Total
(N=527)
Varones
(n=229)
Mujeres
(n=297)
x2 p
Muy buena 19,4 22,7 16,8 5,665 0,129
Buena 60,5 61,1 59,9
Regular 18,8 15,3 21,5
Mala 1,3 0,9 1,7
Muy mala ___ ___ ___
nc ___

Se puede afirmar que la mayor parte de los estudiantes (el 80%) informan de una calidad de vida buena o muy buena. Podemos comprobar en la tabla precedente, además, que no existen diferencias significativas por género en la percepción de la calidad de vida general, al igual que sucedía con la valoración del grado de satisfacción con la vida.

Un análisis relacional entre esta importante pregunta criterial de calidad de vida y otras variables de interés del cuestionario nos permite entresacar una serie de consideraciones (véase anexo). Aunque este análisis será objeto de estudio pormenorizado en otro trabajo, señalemos aquí que la variable calidad de vida general muestra su asociación estadística más alta con la puntuación total en la escala de satisfacción con la vida (r=0.478, p<0,001), y con la lámina calidad de vida reciente del COOP (r=0.358, p<0,001). La calidad de vida muestra una relación importante y significativa con el estado de salud de 0.311 (p<0,001). La relación entre calidad de vida y el sumatorio del Inventario de estresores del estudiante es de 0.352 (r=0.262 con el índice de estrés en los estudios, y r=0.325 con el índice de estrés en otros ámbitos de la vida), correlaciones todas ellas con probabilidad asociada inferior al 1 por mil. En la misma línea de malestar psicológico, la asociación con estado de ánimo depresivo es relativamente baja (r=0.254, p<0,001). Como medida de afecto positivo, encontramos una correlación entre calidad de vida y la lámina de sentimientos del COOP de 0.250 (p<0,001). Las asociaciones con las variables de estudios, ingresos u otras variables de identificación biosociodemográfica y comportamentales son inferiores a las aquí presentadas.

Al objeto de clarificar algo más este entramado relacional, hemos llevado a cabo también, como hicimos con las otras dos variables de interés (estado de salud y satisfacción con la vida) un análisis de regresión lineal múltiple considerando la variable calidad de vida general como variable dependiente y como variables independientes o predictoras las 20 seleccionadas anteriormente y que aparecen en la tabla 4.8.2.2.

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Tabla 4.8.2.2. Análisis de regresión lineal múltiple de la variable «calidad de vida general»
Predictores Beta t sig.
Satisfacción con la vida -0,300 -6,299 0,000
Ingresos familiares -0,155 -3,701 0,000
Grado de suficiencia de dinero mensual 0,144 3,276 0,001
Estado de salud 0,113 2,239 0,026
R=0,663
R2=0,400 (corregida=0,368)

Variables predictoras no significativas: edad, género, disponer de habitación sólo para uno, grado de religiosidad, tener planes profesionales concretos para el futuro, comportamiento saludable, frecuencia de consumo de alcohol, frecuencia de uso de tabaco, horas de sueño, tener relaciones sexuales, estrés en los estudios, estrés en otras áreas, satisfacción en los estudios, malestar físico, malestar psicológico, láminas Coop.

De manera clara podemos observar la contribución singular en la explicación de la variación de la estimación de la calidad de vida de cuatro únicas variables con coeficientes beta significativos: la satisfacción con la vida, los ingresos económicos familiares, el grado de suficiencia percibida en relación al dinero mensual disponible para uso personal, y el estado de salud. Bienestar psicológico, dinero y salud constituyen los tres ingredientes nucleares de la calidad de vida de los estudiantes universitarios, con una R de 0,633 y un coeficiente de determinación de 0,40. Ni el grado de satisfacción con los estudios, el nivel de estrés, las escalas de malestar, los comportamientos saludables o los comportamiento de riesgo de agrado (tabaco, alcohol), el tener o no relaciones sexuales, o la presencia de planes profesionales concretos para el futuro, contribuyen significativamente en la explicación de la varianza de calidad de vida. Por supuesto, que la explicación de tan sólo un 40% nos anima a mirar hacia otras variables importantes y que no hemos estudiado aquí (la personalidad del estudiante, por ejemplo). Pero, en cualquier caso, nos señala la multidimiensionalidad del concepto calidad de vida. Estas relaciones vienen a corroborar, también, la complejidad y heterogeneidad del concepto calidad de vida en los estudiantes universitarios. Por ello, resulta de interés presentar a continuación una aproximación al contenido de este concepto, en el marco de la comunidad universitaria, a través de las respuestas a la pregunta abierta: ¿Qué medidas podrían, según tu opinión, mejorar la calidad de vida en la Universidad? Seguidamente revisaremos, en la misma línea, las respuestas dadas a las medidas que pueden contribuir en opinión del alumno a fomentar la salud en la Universidad.



  —114→  

ArribaAbajo4.8.3. Medidas para mejorar la calidad de vida en la Universidad

Tanto esta cuestión como la siguiente se han planteado en el cuestionario como preguntas abiertas, y es sabido que este tipo de preguntas en los cuestionarios autorrellenados (como es el caso de este estudio) son contestadas por una parte minoritaria de la muestra que se estudie. Afortunadamente, en esta ocasión esto no ha sido así, ya que alrededor de la mitad de los estudiantes han respondido a ambas cuestiones.

Específicamente, a la pregunta sobre las medidas para mejorar la calidad de vida en la universidad han contestado 291 personas (55% de la muestra), 173 mujeres y 118 varones, que aportan un total de 475 propuestas. Se ha analizado el contenido de las respuestas y se ha creado un conjunto de categorías para su mejor comprensión y cuantificación. Las respuestas registradas oscilan entre enunciados breves y párrafos de diversa extensión, que incluyen uno o más enunciados que en ocasiones caen en una misma categoría y en otras ocasiones en varias categorías. Por esta razón la suma de frecuencias de las diferentes categorías suma más de 291 ocurrencias (véase tabla 4.8.3.1).

Tabla 4.8.3.1. Medidas para mejorar la calidad de vida en la Universidad. Distribución de frecuencias por categorías
Enseñanza (horarios, exámenes, planes de estudio, oferta académica, carga lectiva, fondos bibliográficos) 70
Transporte, aparcamientos, acceso al campus 61
Actividades extra-académicas (culturales y deportivas, principalmente) 54
Aulas (ergonomía, climatización, luminosidad, etc.) 53
Profesorado:
        Docencia 15
        Trato humano 31
Alimentación (comida mejor y más sana, principalmente) 42
Fumar (principalmente: medidas más restrictivas) 33
Nuevas tecnologías y enseñanza práctica 30
Teléfonos móviles (restricción) 27
Otros (más higiene, restricción de obras, eliminación de la cementera, disponibilidad de taquillas más máquinas de café, fuentes de agua, servicio psicológico, más teléfonos públicos, etc.) 59
Total 475

El mayor número de respuestas se concentra en cuestiones relacionadas directamente con la enseñanza: enseñanza, profesorado, y nuevas tecnologías y docencia práctica. La naturaleza de estas respuestas es mayoritariamente de censura, de queja: censura al exceso de carga lectiva, a la planificación de los estudios, a la densidad de los horarios; censura en   —115→   relación a la calidad docente del profesorado, a la falta de un trato más humano; y una petición sobresaliente de más ordenadores. Otras dos categorías tienen una relación indirecta con la enseñanza: aulas y actividades extra-académicas. En lo relativo a las aulas, es queja muy extendida la incomodidad de las sillas y pupitres, así como la climatización. En cuanto a las actividades extra-académicas, los alumnos demandan más actividades culturales y una mayor oferta deportiva. Dos categorías aluden a conductas de salud: fumar y alimentación. Con respecto a la primera, la mayoría de las respuestas son demandas de una mayor restricción del comportamiento de fumar: aumentar las zonas de no fumadores, restringir la venta, etc. En relación a la alimentación, los estudiantes solicitan menús más saludables, con mayor oferta de frutas y verduras, de más calidad, etc. La segunda categoría con más respuestas ha sido la de transporte, aparcamiento y accesos: se solicitan más autobuses, mejores aparcamientos, mejora en las salidas del campus, accesos para bicicletas, etc. Una categoría menor pero muy concreta es sobre la restricción de los teléfonos móviles en las aulas. Y por último una categoría residual, miscelánea, donde se sanciona la realización de obras durante el periodo lectivo, la presencia de la cementera (una empresa ubicada cerca de la universidad que produce cemento para la construcción), los servicios de fotocopiadora, etc., o se solicita más servicio psicológico de apoyo al estudiante, taquillas, más máquinas de café, o más teléfonos públicos. Esta última categoría de otras propuestas no sobrepasa la frecuencia de más de 5 ocurrencias por propuesta.

La información aportada por esta cuestión permite refrendar algunas de las cuestiones, que de forma distinta, se planteaban en el apartado de uso y valoración de servicios y otros aspectos de la Universidad de Alicante: la congruencia en las cuestiones relacionadas es clara, a la par que permite una información más ilustrada (ejemplificada). Esta pregunta también nos permite inferir qué entienden los estudiantes por calidad de vida o por una mejor calidad de vida en la universidad. En efecto, la calidad de vida es o puede verse afectada por un abanico amplio de factores: relativos a la ocupación principal o estudios, pero también al ocio (cultura y deporte), la salud (comida, fumar, también deporte), y a las condiciones y oportunidades (transporte, condiciones ambientales, etc.).




ArribaAbajo4.8.4. Medidas para fomentar la salud en la Universidad

Esta pregunta ha recibido menos respuestas que la anterior: 246, 144 de mujeres y 102 de varones. El porcentaje sigue siendo alto para este tipo de preguntas, más del 46% de los estudiantes encuestados. Como sucediera con la pregunta anterior, las respuestas han oscilado entre una breve sentencia y un párrafo más o menos extenso. Por tanto, también aquí el número de ocurrencias de las diferentes categorías creadas supera al número   —116→   de respondientes. En este caso, también, el total de propuestas emitidas es menor, contabilizándose un total de 318. Las categorías de respuesta y sus frecuencias pueden observarse en la tabla 4.8.4.1.

Tabla 4.8.4.1. Medidas para fomentar la salud en la Universidad. Distribución de frecuencias por categorías de respuestas
Fomento del deporte (más instalaciones deportivas, más actividades, etc.) 69
Fumar (restricción, cursos para dejar de fumar, etc.) 48
Alimentación (comida más saludable en el campus, educación sanitaria en la materia) 38
Aulas (mejora en la climatización, ergonomía, limpieza) 17
Gabinete médico (más servicio) 15
Gabinete psicológico (más servicio) 8
Ocio y descanso (más zonas verdes, lugares para el descanso, taquillas) 7
Otros (eliminación de la cementera, reducción del tráfico, más oportunidad para la donación de sangre, menos obras en periodo lectivo, etc.) 15
Total 318

Los estudiantes opinan que las iniciativas para mejorar la salud en la universidad descansan, en primer lugar, en actividades de educación sanitaria, y en segundo lugar, en el fomento de tres conductas de salud: más deporte, menos fumar y mejor alimentación. En un lugar mucho más secundario: mejora de las condiciones del aula, más asistencia médica y psicológica y ocio.

En esta pregunta no sólo ha habido menos respuestas que en la anterior, sino que éstas, además, han sido más simples (menos ítems de información por respuesta) y conceptualmente menos abarcadoras. Parece deducirse que los estudiantes tienen un concepto de salud más nítido que en el caso de la calidad de vida. Asimismo, la salud les parece un concepto más simple, menos abarcador, y en gran parte subsumible en el de calidad de vida. Complementariamente, calidad de vida es un concepto más abarcador, complejo y borroso. La calidad de vida tiene que ver con salud (fumar, alimentación, deporte, etc.), pero lo trasciende: condiciones de vida, oportunidades, ocio y negocio, etcétera. En cualquier caso, ambos conceptos se refieren a realidades muy significativas e importantes para el estudiante universitario.







  —[117]→  

ArribaAbajo5. Conclusiones


ArribaAbajo5.1. Instrumento de estudio, grado de participación y generalización de los resultados

Se ha elaborado un instrumento de estudio de la calidad de vida y del estado de salud del estudiante universitario, siguiendo las recomendaciones de la metodología de encuesta con aplicación de los principios de diseño cognoscitivo en la redacción y presentación de cuestionarios (véase, por ejemplo, Mullin et al., 2000), que evalúa adecuada y válidamente las cuestiones de interés.

Algunas de las cuestiones planteadas en nuestro instrumento de medida se han formulado en más de una ocasión, pero con formato de pregunta y respuesta diferentes, y en partes distintas del cuestionario. Esto ha ocurrido así con algunos ítems relacionados con la asistencia a la universidad, la restauración, las condiciones de las aulas, las actividades de ocio, y el ejercicio físico o deporte. Las diferentes formas de abordar una cuestión no sólo han variado en los aspectos formales ya aludidos sino que también han supuesto algunas variaciones (ligeras) de contenido. Las respuestas de los estudiantes a estas cuestiones formuladas más de una vez han mostrado un elevado grado de concordancia (a nivel grupal), lo que junto a otros indicadores (elevada tasa de respuesta, cuestionarios completos, escasas respuestas omitidas o en blanco, etc.) nos hace pensar que el grado de colaboración de los estudiantes ha sido elevado, a la par que esforzado y genuino.

Las tasas de respuesta y participación de los estudiantes universitarios en este estudio mediante encuesta por correo son altamente satisfactorias. Podemos afirmar que los resultados derivados de este estudio se pueden generalizar al conjunto de los estudiantes de la Universidad de Alicante.

Los resultados de la comparación de la muestra de estudiantes participantes con los de la población de matriculados confirman una vez más que estamos ante una muestra representativa de la población de estudiantes.



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ArribaAbajo5.2. Perfil biosociodemográfico

Los estudiantes de la Universidad de Alicante presentan el siguiente perfil biosociodemográfico:

El estudiante promedio tiene 22 años de edad y mide 1,71 m, 1,65 las mujeres y 1,78 los varones; pesa 65,7 kg, 58,5 las mujeres y 75 kg los varones. El 54,5% son mujeres y el resto, 45,5, varones (56,5 y 43,5 en la muestra, respectivamente). La gran mayoría son solteros, pero casi la mitad mantiene relaciones de pareja. Menos del 5% tiene algún hijo, hecho éste más frecuente entre las mujeres. La mayoría vive con sus padres. Menos del 1% son de nacionalidad extranjera. La religión católica es, con diferencia, la mayoritaria, aunque el 75% se declara poco o nada religioso; las mujeres declaran un mayor grado de religiosidad que los varones.

El nivel educativo de los padres de los estudiantes es superior al de la población general española (según datos del INE para el año 1997). El nivel de ingresos familiares es también superior al de la población general española. Ambas cuestiones indican que la clase social del estudiante universitario es superior a la de la población general. Téngase presente que, a pesar del fuerte incremento en términos absolutos y relativos de la población universitaria española en los últimos años, para el curso 1996-1997 la población universitaria supone el 40% respecto del total de su grupo de edad -tasa bruta de escolaridad universitaria- (INE, indicadores sociales). La fuente principal de financiación de los estudios es a través de la manutención de los padres. El 17% dispone de alguna beca de estudios.

Aunque no hemos explorado en profundidad la situación económica del estudiante universitario, es de destacar el porcentaje de estudiantes (el 40%) que considera insuficiente el dinero de disposición personal mensual, así como el porcentaje de estudiantes que deben trabajar durante el curso, además de estudiar, como modo de financiación de los estudios (cerca del 25%). Existen investigaciones que han encontrado que las circunstancias económicas, o la situación financiera, de los estudiantes puede tener un impacto negativo sobre su salud (Roberts et al., 2000). Estos autores han encontrado que el 47% de sus estudiantes entrevistados tenía que trabajar además de estudiar, y que otro 43% presentaban deudas en la actualidad. La literatura científica revisada por estos mismos autores registra una problemática económica relativa a insatisfacción de los estudiantes con su situación económica que va del 18,5% al 90%, lo que conllevaría la posibilidad de abandonar los estudios universitarios a causa de estas dificultades económicas.



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ArribaAbajo5.3. Estudios

Los estudios constituyen un elemento nuclear de la vida del estudiante universitario. Los estudios pueden ser tanto una amenaza para la salud, el bienestar y la calidad de vida del estudiante como una oportunidad para vivir una vida de calidad.

La Universidad de Alicante tiene alrededor de 30.000 alumnos. Los estudios de Derecho y los de Economía y Empresa reúnen aproximadamente un tercio de toda la población universitaria. Algo más del 70% de los estudiantes está cursando los estudios que deseaba cursar (los elegidos en primera opción). La asistencia a clase es mayoritaria: alrededor del 75% acude la mayoría de los días.

El estudiante de la Universidad de Alicante concede gran importancia al hecho de lograr buenos resultados académicos, y cree que el nivel de exigencia de sus estudios es elevado. Tiene una percepción realista de su rendimiento académico, en relación al de sus compañeros. Las mujeres superan a los varones en rendimiento académico: tienen una nota media superior y menos asignaturas pendientes de cursos anteriores; también dedican más tiempo a actividades de aprendizaje que los varones. Las clases magistrales y el estudio a solas son las dos actividades principales de aprendizaje, que a su vez son también las más tradicionales.

Los estudiantes se encuentran satisfechos con los estudios que están cursando, así se deduce de sus respuestas al «Inventario de satisfacción con los estudios»; no se observan diferencias entre varones y mujeres. Un análisis más detallado revela algunas zonas de conflicto: percepción de cierto caos en la organización de los estudios -planes de estudio-, dificultad para expresar ideas y opiniones propias y cierto grado de desorientación. El nivel de satisfacción con los estudios no es óbice para que paralelamente los estudiantes, más de la mitad, se sientan estresados con sus estudios. Y esto es más acusado en el caso de las mujeres. Más específicamente, los estudios en general y las exigencias de la carreras son los estresores más importantes. En ambos casos, las mujeres se ven más afectadas que los varones. La satisfacción con los estudios y el estrés ligado a los estudios tienen entre sí una moderada relación lineal e inversa (r=-0,43), es decir, a mayor satisfacción menor estrés y viceversa.




ArribaAbajo5.4. Imagen de la Universidad de Alicante y valoración de los recursos universitarios

Los estudiantes refieren una imagen positiva y constructiva de la Universidad de Alicante en general, así como de los servicios y de las personas que viven y trabajan en este contexto. Con todo, se observa un uso escaso de la oferta cultural y deportiva, aunque se valora muy positivamente. Paradójicamente,   —120→   frente al escaso uso de estas ofertas, los estudiantes expresan en otra parte del cuestionario su deseo, ampliamente compartido, por una ampliación de los servicios y ofertas culturales y deportivas. Más de un tercio de los estudiantes come frecuentemente en el campus y la valoración de la restauración y de la oferta de comidas es positiva, pero ello no es óbice para que una importante minoría destaque y critique severamente este aspecto. Respecto a las nuevas tecnologías, menos de la cuarta parte no ha hecho uso de internet y del correo electrónico desde la universidad; el campus virtual es usado en menor medida. Viene al caso señalar una petición de un número significativo de estudiantes: un mayor acceso o disponiblidad de ordenadores. La biblioteca general es la biblioteca más usada de entre las existentes en el campus, pero el estudiante usa más las bibliotecas como salas de estudios que como centros de consulta y documentación. Aunque menos de la cuarta parte de los estudiantes realiza prácticas en empresas, hospitales y otros centros, quienes las realizan las valoran (muy) positivamente. Los estudiantes se quejan de la falta de comodidad de las aulas: pupitres y asientos y de la climatización. Otros motivos de queja son los aparcamientos y los servicios de fotocopiadoras, especialmente estos últimos, y las salidas viarias del campus. Por el contrario, las zonas verdes y peatonales del campus, el diseño arquitectónico y su ubicación son muy bien valorados. La valoración del profesorado, calidad docente y trato, es positiva, pero cerca del 20% de los estudiantes otorga un suspenso. El personal de administración y servicios es ligeramente mejor valorado. Por último, la Universidad de Alicante recibe una calificación general excelente.

Los resultados de esta sección nos permiten concluir, también, una acentuada lenidad por parte de las mujeres universitarias, en comparación con los varones, en la valoración de los recursos universitarios.




ArribaAbajo5.5. Comportamiento relacionado con la salud y con el tiempo libre

Resulta interesante detallar algunas cuestiones. El 68% de los estudiantes son consumidores habituales de bebidas alcohólicas. Este hábito es más frecuente entre los varones, que, a su vez, son también mayores consumidores que las mujeres. Esta prevalencia de consumo es inferior en cinco puntos a la de la población española de entre 19 y 28 años con estudios universitarios (EDCD, 1997). Las bebidas de alta graduación son las de mayor consumo. La escala de dependencia alcohólica CAGE (Bruguera et al., 1994) arroja un valor preocupante: más del 8% de los estudiantes son consumidores excesivos de bebidas alcohólicas. En la misma línea de preocupación hay que notar el resultado del alto porcentaje de estudiantes (38%) que admite haber conducido habiendo abusado del alcohol o como acompañante de un conductor que ha bebido excesivamente.

  —121→  

El 34% de los estudiantes son fumadores habituales, aproximadamente el 5% son ex-fumadores y las edades de inicio más frecuentes se sitúan entre los 15 y los 18 años. Hay más mujeres fumadoras (40%) que varones (27%). En la última encuesta nacional sobre consumo de drogas (EDCD, 1997), el único tramo de edad en el que las mujeres superan a los varones en el consumo de tabaco es el comprendido entre 15 y 18 años; sin embargo, entre los estudiantes de la Universidad de Alicante, las mujeres superan en trece puntos (40% frente al 27%) a los varones. Este dato es muy expresivo de la tendencia observada internacionalmente a una gran incorporación de las mujeres al consumo de tabaco y, paralelamente, una disminución en su prevalencia en el caso de los varones.

Casi la mitad de los estudiantes ha consumido en alguna ocasión cannabis (valor que supera en doce puntos al observado para la población española de entre 18 y 29 años de edad (EDCD, 1997)), y, aproximadamente, el 10% lo consume con cierta regularidad. La cocaína, el éxtasis, y los tranquilizantes son las siguientes drogas más consumidas. De nuevo hay que destacar que los valores de consumo son claramente superiores, salvo para el caso de los opiáceos, a los de poblaciones de referencia, en este caso a los de la población española de entre 16 y 25 años (CIRES, 1993) (Los datos de la EDCD de 1997 no están aún desagregados por edades para esta cuestión). Existen, al menos, dos explicaciones posibles: los estudiantes de la Universidad de Alicante consumen más drogas que sus iguales, o sus respuestas han sido más «genuinas». Nos inclinamos más por esta última interpretación debido al inusual bajo nivel de no respuesta para este tipo de preguntas y al patrón más saludable observado en otros comportamientos: consumo de bebidas alcohólicas y fumar, principalmente.

La mayoría de los estudiantes accede al campus en vehículos a motor. El 50% utiliza siempre el cinturón de seguridad en sus desplazamientos en automóvil, y el 66% usa el casco protector cuando viaja en motocicleta.

Salir con los amigos, ver la televisión y escuchar música son las principales actividades de ocio. El tiempo dedicado a las actividades de ocio propuestas es mayor entre los varones que entre las mujeres; justo al contrario de lo que sucedía con el tiempo dedicado a las actividades de aprendizaje.

El resultado de que sólo el 37% de los estudiantes universitarios realiza el ejercicio físico adecuado para su edad es un serio motivo de preocupación y un marcador claro de que se debe trabajar en la línea de potenciar aun más el ejercicio físico en la población universitaria.

A pesar del consumo saludable de muchos productos alimentarios por parte de la comunidad estudiantil universitaria, conviene notar el dato de que más de un tercio de los estudiantes consuma comida rápida con relativa frecuencia.

Los valores del índice de masa corporal (IMC) muestran que casi dos tercios de los estudiantes tienen un peso saludable; un 20% presentaría   —122→   bajo peso, y un 16% sobrepeso. Las mujeres, en comparación con los varones, tienen una percepción más distorsionada de su cuerpo relativa a la dimensión delgadez-obesidad.

El comportamiento sexual del estudiante universitario se caracteriza por una notoria fidelidad a la pareja y por prácticas de sexualidad segura. Un 70% de estudiantes ha tenido alguna práctica de actividad sexual de tipo coital, con una iniciación alrededor de los 18 años. La utilización del preservativo en los contactos sexuales con nuevas parejas es una práctica frecuente entre los estudiantes universitarios, lo que explicaría, en parte, la escasa presencia de problemas de salud ligados a la sexualidad o la baja petición de pruebas de VIH. Debemos destacar que únicamente el 15% de las estudiantes se realizan con regularidad una prueba citológica (test de Papanicolau), y que el 59,3% no se ha realizado nunca esta prueba.




ArribaAbajo5.6. El estado de salud y la calidad de vida relacionada con la salud

El estado de salud de los estudiantes universitarios es bueno. Esta valoración positiva del estado de salud reciente (el 85% de los estudiantes) o a lo largo del último año (el 74%) es superior a la cifra de la población adulta de la Encuesta Nacional de Salud de 1997 (el 68%) (cf., Encuesta Nacional de Salud en España 1997). El estado de salud percibido durante el último año y el estado de salud reciente comparten un 31 % de varianza. Los estudiantes presentan unas características sanitarias claramente favorables. Se preocupan por su salud y se ocupan en diversos comportamientos relacionados con la salud. Sus hábitos de vida son satisfactorios y saludables. Su estado de salud interfiere mínimamente en su faceta sociopersonal a la hora de llevar a cabo sus actividades habituales. La calidad de vida relacionada con la salud, medida a través de las Láminas COOP, muestra un perfil de funcionamiento físico, psicológico y social netamente positivo. Las mujeres, sin embargo, presentan indicadores menos positivos de salud percibida. Consistentemente, las mujeres refieren un mayor nivel de interferencia cotidiano ligado a su estado de salud. El nivel de enfermedad autoinformado es menor que el de las molestias psicosomáticas. El promedio de días de enfermedad al año es inferior a 10 días. La conclusión de todo ello es la siguiente: prevalencia baja de enfermedad grave o importante junto a nivel relativamente alto de sintomatología psicosomática. Una conclusión de gran interés es la constatación de diferencias de género en relación a una mayor declaración de enfermedades, molestias y síntomas por parte de las mujeres.

La gran mayoría de los estudiantes universitarios es consciente de la importancia de la salud como un recurso necesario para una vida de cantidad y de calidad. Los estudiantes presentan un perfil caracterizado por un   —123→   gran potencial de salud, si bien aparecen también ciertos posibles riesgos específicos que hemos podido identificar como el patrón de uso de cigarrillos, el consumo de alcohol, el notable grado de sedentarismo, y los problemas asociados a un control inadecuado del estrés. Es importante recordar y resaltar el mayor consumo de cigarrillos en las estudiantes frente a sus compañeros varones, así como el excesivo consumo de bebidas alcohólicas de alta graduación. En la misma línea, las estudiantes practican menos deporte que sus compañeros, dedican menos horas a la práctica de ejercicio físico, y presentan una imagen corporal más distorsionada que sus compañeros.




ArribaAbajo5.7. La satisfacción con la vida del estudiante universitario

Se ha señalado que un indicador de la calidad de vida de un sociedad es el grado de felicidad y de satisfacción con la vida que los ciudadanos de esa sociedad experimentan o refieren (Diener y Lucas, 2000). La satisfacción con la vida de los estudiantes universitarios de nuestro estudio es más baja que la proporcionada (corregida por alternativa de respuesta) en el trabajo original de Diener et al. (1985), así como en comparación con otros grupos con los que hemos trabajado previamente (mujeres embarazadas, por ejemplo). Debemos notar, sin embargo, que la muestra de estudiantes en el trabajo original de Diener y colaboradores no es representativa como la nuestra sino incidental o disponible. La satisfacción con la vida se mide aquí como una valoración actual y retrospectiva que hace la persona acerca del grado en que ha conseguido los objetivos deseados o propuestos (es decir, el grado de congruencia entre aspiraciones y logros como proceso cognoscitivo referido al transcurso de la vida). Por tanto, la satisfacción viene a ser una especie de valoración desapasionada y reflexiva de lo bien que van las cosas y de lo bien que han ido hasta el momento actual. Hay que decir que la muestra de validación original en el trabajo de Diener y colaboradores es incidental o de fácil disposición y no representativa como la de nuestro estudio. Ello puede significar, o bien que esta escala carece de validez de contenido para este grupo de población, o bien que, como cabe esperar, los niveles de satisfacción con la vida no son altos puesto que todavía no se ha conseguido satisfacer algunas de las necesidades, objetivos o metas que pueden estar relacionadas con este constructo (por ejemplo, terminar una carrera, vivir en pareja y formar una familia, ser autosuficiente económicamente, etc.). No obstante, lo anterior no significa que la satisfacción con la vida sea baja, sino que los estudiantes universitarios presentan un grado moderado de satisfacción con la vida. Si la midiéramos con una escala de puntuación de 1 a 10, la muestra obtendría casi un notable. Nuestros estudiantes se caracterizarían por presentar una tendencia de moral alta.

Los predictores de la satisfacción del estudiante encontrados son: la valoración de la calidad de vida por parte del estudiante, el grado de satisfacción con los estudios, algunos aspectos de salud reciente (ausencia   —124→   de malestar tanto físico como psicológico, salud como funcionamiento cotidiano medido por las láminas COOP), y la actitud hacia un comportamiento saludable.




ArribaAbajo5.8. La calidad de vida general

Una línea complementaria aparece con la pregunta referida a la valoración de la calidad de vida en general. Aquí, los resultados son concluyentes: los estudiantes universitarios experimentan, y refieren tener, una buena calidad de vida (el 80%).

Lo mismo que apuntábamos para la variable satisfacción viene a reflejarse para este concepto, aunque con ciertos matices. Comentemos alguna cosa. Notemos que la principal variable asociada a la calidad de vida es el grado de satisfacción con la vida, con una explicación del casi 23% de la varianza conjunta (recordemos, una correlación moderada de cerca de 0,48). Por tanto, bajo el epígrafe calidad de vida nos topamos con un constructo de perfiles y aristas diferente al monolítico de pensar que prácticamente calidad de vida y satisfacción son entidades intercambiables. Pese a que el grado de satisfacción con la vida es el predictor más potente de los aparecidos en nuestro estudio, otras dos variables lo complementan: la situación económica, y el estado de salud. Salud y dinero como recursos poderosos para una vida de calidad, que se traduce también en una experimentación gozosa de la vida (la satisfacción de la vida como un todo).

Nosotros sostenemos que la calidad de vida es preponderantemente funcionamiento individual y bienestar. No es de extrañar, pues, la aparición de la salud y del dinero como poderosos recursos para el funcionamiento personal y la consiguiente satisfacción vital. En este sentido, la ocupación de la vida (lo que uno hace o deja de hacer) cobra un sentido capital en la delimitación conceptual de la calidad de vida. A las buenas condiciones de vida (o habitabilidad de vida), a la competencia personal para la vida, a la utilidad de la vida, y a la valoración de la vida (cuatro «cualidades» diferenciadas y nucleares de la propuesta de calidad de vida de Veenhoven, 2000), habría que completar con la ocupación de vida. En otras palabras, la calidad de vida del estudiante está determinada, básicamente, por su comportamiento, por lo que hace o deja de hacer, y cómo experimenta este funcionamiento.

No podemos olvidar concluir aquí otro aspecto de gran interés relativo a las diferencias por género. La mayor presencia en las mujeres de aspectos y situaciones ligadas a malestar en comparación con sus compañeros varones (molestias, afectividad negativa, problemas de salud, etc.), queda anulada en las variables relativas a los indicadores positivos de bienestar psicológico (satisfacción con la vida, y calidad de vida general). Tanto en satisfacción con la vida como en calidad de vida no existen diferencias por género.



  —125→  

ArribaAbajo5.9. La promoción de la calidad de vida y la salud en la universidad desde la perspectiva del estudiante

La calidad de vida y la salud son dos conceptos centrales de este estudio, y han sido examinados con detalle, directamente y a través de su red conceptual de relaciones. La fundamentación se ha asentado en los antecedentes teóricos y empíricos que aporta la literatura especializada. Sin embargo, hemos realizado una aproximación marginal al concepto lego, esto es, del estudiante, sobre lo que éste entiende por calidad de vida y por salud, o al menos así puede deducirse, parcialmente, de las respuestas a las dos preguntas con formato abierto acerca de cómo se puede mejorar la calidad de vida y la salud en la universidad. Los estudiantes atribuyen rasgos distintos a ambos conceptos. La calidad de vida es claramente multidimensional, implica a la salud o se ve afectada por ella, pero abarca además a otras condiciones y conductas de la persona, así como a oportunidades y condiciones socioambientales. La salud es, o se ve afectada por, lo que solemos hacer o dejar de hacer: fumar, comer, hacer deporte; o ciertas condiciones ambientales: ruido, polución ambiental, condiciones físicas del estudio, etcétera. La salud, por tanto, es una cuestión primordialmente física. ¿Hasta qué punto la perspectiva del científico y la del lego coinciden? Aunque el examen de la perspectiva lega del estudiante ha sido sólo marginal, sí parece que en lo concerniente a la calidad de vida la convergencia entre el científico y el lego es notable, mientras que no sucede así con el concepto salud, donde el modelo biologicista, físico, ha sido sustituido por un modelo biopsicosocial más integrador, desde muchas disciplinas, pero no tanto desde el punto de vista del estudiante.

Permítasenos que nos preguntemos en este momento acerca de la posible generalización de los resultados y conclusiones de este estudio al conjunto de estudiantes universitarios. Dejando de lado los aspectos más específicamente ligados al diseño y situación concreta de la Universidad de Alicante, podemos señalar que existen trabajos que confirman que el bienestar psicológico subjetivo presenta diferencias más acusadas entre diversas muestras representativas de la población de varios países que entre muestras de estudiantes universitarios (Veenhoven, 1993; cfr. Diener y Lucas, 2000). Estos autores intentan explicar esta conclusión apelando a que los estudiantes universitarios conforman un grupo poblacional de élite que muy probablemente satisface sus necesidades en la mayoría de las sociedades.

Estos son, cuanto menos, los resultados y conclusiones que hemos obtenido en nuestro estudio y que deseamos comunicar al lector interesado.





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ArribaAbajo6. Referencias bibliográficas

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Arriba7. Anexos

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7.1. Cartas de presentación

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Alicante, 20 de marzo de 2000

Estimado/a estudiante:

Las personas queremos tener una vida con salud, con bienestar, satisfactoria, incluso plena. Cómo nos sentimos, cómo vivimos, con quién vivimos, dónde trabajamos o estudiamos, son todas ellas circunstancias que definen nuestra vida. Existen muy pocos estudios que describan cómo es la vida de los estudiantes universitarios, de sus hábitos de salud, su bienestar, su percepción de la vida universitaria, su satisfacción con los estudios que cursan. Son estas cuestiones, y otras relacionadas, las que pretendemos examinar con esta investigación.

Para la realización de este estudio sobre la salud y la calidad de vida del estudiante de la Universidad de Alicante necesitamos la colaboración de todas aquellas personas que, como tú, han sido elegidas al azar de entre todos los estudiantes de esta universidad. La colaboración que te pedimos consiste en rellenar el cuestionario que se adjunta a esta carta y que lo remitas, una vez contestado, a la dirección que figura en el sobre de devolución que también te proporcionamos. Para facilitarte esta tarea, el sobre de devolución ya está franqueado y con la dirección de destino de forma que sólo tengas que introducir el cuadernillo ya contestado y remitírnoslo por correo. Queremos insistir en la importancia de tu colaboración para poder obtener una imagen que represente con fidelidad lo que le pasa y opina el estudiante universitario; en caso contrario, los datos obtenidos carecerían de la suficiente validez.

El cuestionario es anónimo, todos los datos son confidenciales y sólo se utilizarán con fines estadísticos de investigación. El tiempo aproximado para rellenar el cuestionario es de 45 minutos.

Conocer cómo son las cosas es un paso previo al intento de mejorarlas. Este estudio aportará información sobre la calidad de vida del estudiante universitario y sus condicionantes. Los resultados se publicarán en revistas especializadas; si estás interesado en recibir una copia de ellos, cuando estén disponibles, te la enviaremos gustosamente. Para ello, pon tu dirección en el sobre de respuesta o solicítanoslo por otro medio (por carta o por teléfono a la dirección que figura al pie de esta carta). Como un detalle de agradecimiento por tu participación te ofrecemos este bolígrafo como obsequio y que puedes utilizar para cumplimentar el cuestionario.

Muchas gracias por tu tiempo y dedicación. Recibe un cordial saludo,

 Firma de Abilio Reig Ferrer

Fdo.: Abilio Reig Ferrer
Catedrático de Psicología de la Salud



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Alicante, 27 de marzo de 2000

Estimado/a estudiante:

La semana pasada te enviamos un cuestionario sobre calidad de vida y salud. Como ya te señalábamos en la presentación del estudio, tu nombre fue seleccionado al azar de entre los estudiantes de la Universidad de Alicante.

Si ya nos has remitido el cuestionario recibe nuestro sincero agradecimiento. Si aún no lo has hecho, por favor, hazlo hoy mismo. Ten en cuenta que el cuestionario sólo se ha enviado a una pequeña muestra representativa de estudiantes de la Universidad de Alicante. Pero para que esta muestra sea finalmente representativa es indispensable la máxima colaboración de los estudiantes seleccionados; de esta forma, las opiniones y comportamientos de otras muchas personas que se encuentran en circunstancias similares a las tuyas y a las de los demás estudiantes seleccionados podrán ser tenidas en consideración.

Si fuera el caso que hubieses extraviado el cuestionario, o que no lo hubieras recibido, llámanos al teléfono 965 90 39 90 y hoy mismo te enviaríamos otro cuestionario.

Firma de Abilio Reig Ferrer

Fdo.: Abilio Reig Ferrer
Catedrático de Psicología de la Salud



  —[139]→  

Alicante, 10 de abril de 2000

Estimado estudiante:

Hace aproximadamente tres semanas que nos dirigimos a ti para pedirte tu colaboración en el estudio sobre la calidad de vida y la salud del estudiante universitario. Dado el carácter anónimo de este estudio, no nos es posible saber si nos has remitido ya el cuestionario -y en ese caso muchísimas gracias- o si no lo has remitido. El motivo de esta nueva carta es, precisamente, animarte de nuevo a participar si todavía no lo has hecho.

Como te decíamos en la primera carta, creemos que puede ser muy interesante y útil conocer cómo vive el estudiante su vida universitaria, cómo valora su Universidad, sus servicios, cuál es su nivel de satisfacción con los diferentes aspectos universitarios, cuál es su bienestar y su calidad de vida, etc. Apenas existen datos rigurosos sobre estas cuestiones, y una característica esencial de este estudio es su pretensión de obtener una imagen fiel, representativa y por tanto aplicable a toda la población universitaria; de ahí la necesidad de que la muestra seleccionada al azar participe al máximo, y por tanto nuestra insistencia en tu colaboración.

Por el tiempo transcurrido desde el primer envío, es probable que hayas extraviado el cuestionario que te enviamos en su momento; por tanto, te volvemos a adjuntar el cuestionario y el sobre de devolución. ¡Sería muy útil poder contar con tu opinión a través del cuestionario! Recibe en todo caso nuestro sincero agradecimiento por la atención que nos has dispensado.

Sinceramente, un cordial saludo

 Firma de Abilio Reig Ferrer

Abilio Reig Ferrer
Catedrático de Psicología de la Salud






7.2. Descripción estadística de los índices empleados

Total Varones Mujeres
Índice o escala n.º de
ítems
Consistencia
interna (alfa)
media desviación
típica
(amplitud) media desviación
típica
media desviación
típica
Satisfacción con los estudios 7 0,72 20,53 3,84 10-28 20,34 3,86 20,67 3,82
Estrés en los estudios 6 0,69 13,06 2,92 6-23 12,72 3,04 13,31 2,80
Estrés en otras áreas 8 0,67 14,06 3,81 4-27 13,56 3,53 14,44 3,98
Molestias/malestar físico 10 0,80 21,09 5,75 3-40 18,33 5,05 23,18 5,26
Molestias/malestar psicológico 7 0,81 16,55 4,38 2-28 15,01 4,21 17,74 4,14
Comportamiento saludable 4 0,60 11,44 2,14 5-16 12,05 2,03 10,98 2,11
COOP (CVRS) 8 0,79 17,43 4,93 8-34 15,97 4,43 18,56 5,01
Satisfacción con la vida 5 0,83 16,63 3,91 6-25 16,93 3,80 16,42 3,98






 
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