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ArribaAbajo El amor no es amado

Antonio Vallejo





I

La pasión del Señor inspira a Roma, y Roma ordena;
pero nadie obedece:
torrente de criaturas, los pies del reino sobre la testa del monarca,
sigue cayendo en las tinieblas.

¿Cómo hacer sin tristeza el camino de cruz, Cireneo,
fuera de la alegría, fuera de la obediencia,
si has de llevar la cruz, aunque no quieras?
Porque mal para ti, de toda eternidad,
si consigues burlar a los soldados y hartar el hombro a la fatiga:
se te llenará de insultos la boca, y de saliva.

¿Cómo aceptar el cetro de escarnio y la bebida acre,
y la postura incómoda levantado en el aire, sin saber
que esas cosas convienen exactamente a Dios y al hombre?
¿Cómo hablar sin tener la palabra?
¿Cómo callar sin tener el silencio?
¿Cómo llegar sin camino?
¿Cómo recordarán los hombres, sin saber?
¿Cómo se alegrarán, sin haberse dolido?
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Danos hambre, Señor, pues vamos ahítos a tu mesa;
y hay quienes tragan pan y eructan soberbia.


II

Qué horror, Dios mío, la luz sin luz, el amor sin amor de tus hijos deformes:
mueven la lengua vertiginosamente y no dicen palabra;
y si callan, el ruido aumenta y les da miedo;
y recuerdan, pero no saben. No tienen hambre, no tienen alegría:
sus carcajadas hacen temblar al pobre pájaro
en lo obscuro del bosque

Vale más seguir que volver: dice el necio.
Y dice: el árbol miente y las estrellas;
es falso, dice, el testimonio de mis manos,
e indiferente la semejanza de mi prójimo.
Y entretanto, sobre los montes de donde viene nuestro auxilio,
la infinita paciencia destila sangre y agua.

Señor asoma tu clemencia y mira al rey como se arrastra henchido,
vuelto de espaldas a la luz, vendido a los amores subterráneos,
partida en dos la lengua, y los ojos de lodo lúcidos bajo el lodo.
Mira a la sierva mal regida meter las mulas del rey en palacio,
y cómo viene abajo con las audiencias de la chusma la inocente sala del trono.
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¿Quién nos dará que el rey vuelva a cantar en comunión católica la alegre historia de su miseria?
¿Quién nos dará que el rey vuelva a llorar ante la perfección de la rosa?